CONFERENCIA EN LA UNIVERSIDAD NACIONAL DE PIURA


UNIVERSIDAD NACIONAL DE PIURA

VI SEMINARIO NACIONAL DE MINAS, GEOLOGÍA, PETRÓLEO
Y QUÍMICA

XXXVI ANIVERSARIO DE LA FACULTAD DE MINAS

“MINERÍA DESARROLLO RESPONSABLE EN EL PERÚ
DESAFÍOS Y OPORTUNIDADAS”

FECHA: 19 AL 21 DE NOVIEMBRE DEL 2012




CONFERENCIA DE LUIS GULMAN CHECA

TEMA: “EXPLOTEMOS  NUESTROS RECURSOS MINEROS”

21 DE NOVIEMBRE ENTRE 12.00 Y 12.30 PM












EXPLOTEMOS  NUESTROS  RECURSOS  MINEROS 

Siendo sabido que todas las actividades humanas  atentan contra el medio ambiente,  preguntémonos  por qué somos tan reacios a explotar nuestros recursos mineros cuando, paralelamente y sin el  menor reparo, no solo hemos permitido se diezme casi hasta la extinción nuestra antaño gran riqueza ictiológica marina, sino  también dejamos contaminar atrozmente nuestras bahías;  deviniendo en botaderos pestilentes de desechos en los que solo un trastornado osaría sumergirse.

Curiosamente, habiéndose tomado la defensa  de la agricultura   para oponerse a la minería en la asonada realizada en la ciudad de Tambogrande el año 2002, aduciéndose la imposibilidad que ambas cohabitaran, esgrimiéndose  arengas como AGRICULTURA  O  MINERÍA y AGRICULTURA  ES  VIDA,  MINERÍA ES  MUERTE,  como si no fuera sabido  que ambas conviven en todo el mundo; cada vez salen más a la luz los graves perjuicios contaminantes  ocasionados por la  agricultura.

“El uso masivo de tecnología agrícola diseñada para maximizar la producción (plaguicidas, pesticidas o fertilizantes), sin tener en cuenta la sostenibilidad de los cultivos, envenena tanto los suelos como la cadena alimenticia derivada de esta, afectando inclusive al ser humano”

En la India,  ¿se desarrolla agricultura y se usan pesticidas? La respuesta es sí, a pesar de que el 03 de diciembre de 1984, se produjo un atroz accidente en la fábrica de pesticidas de Union Carbide en Bhopal, escapando al ambiente 45 toneladas de Isocianato de Metilo, ocasionando la muerte de 6,000 a 8,000 personas durante la primera semana; posteriormente fallecieron 12,000 más; hubo 600,000 afectados 150,000 de los cuales quedaron con graves secuelas. Asimismo, murieron miles de cabezas de ganado y animales domésticos.

Entonces, siendo un hecho que la agricultura no solo contamina sino que conlleva enormes riesgos contra la humanidad, ¿habrá alguien  que abogue por su eliminación? Absurdo, imposible, por  cuanto es indispensable porque necesitamos de los alimentos y bienes que produce, por lo que   debemos tratar que  sea lo menos contaminante posible.

En el diario “El Comercio” del pasado 17 de octubre, se publicó la siguiente información: UNOS 378 TRABAJADORES SE INTOXICAN EN UN CAMPO AGRÍCOLA DE ICA. Dijo el director de Salud de Ica que inhalaron el pesticida llamado Clorpirifos, “El veneno vino de un fundo adyacente  y al no tomar las medidas adecuadas de protección ocasionó estos cuadros masivos de intoxicación”.

Estos sufridos trabajadores recibieron inmediata atención, sanaron y  continuaron trabajando. Sin embargo, de haberse aplicado los  métodos usados por quienes  se oponen  a la minería; los iqueños ya deberían   haber asolado los campos de cultivo y degollado a los responsables.

Un fatal accidente acaecido el pasado lunes por la noche en la carretera Sullana Paita a la altura de La Huaca, con 05 fallecidos instantáneamente más 19 heridos, y que habría sido ocasionado por la humareda proveniente de la quemazón de un cultivo de caña de azúcar  que invadió la vía  cegando a los conductores; deviene en una muestra más de que la fatalidad acecha tras todas las acciones del hombre. Así, trayendo a colación la arenga tambograndina LA AGRICULTURA ES VIDA, LA MINERÍA ES MUERTE, debería traernos a la mente la frase bíblica: QUIEN ESTÉ LIBRE DE PECADO, QUE TIRE LA PRIMERA PIEDRA.

Un último comentario sobre los  nocivos efectos de la agricultura sobre el medio. En  la época de oro del algodonero, cuando se derivó el río Quiroz al  Piura, y vivimos un largo período seco entre los 50 y los 60, en nuestros valles había no menos de 20 avionetas fumigadoras aplicando sobre los algodonales. Simultáneamente, palomas y ardillas casi desaparecieron. No obstante, desde hace buen tiempo dichos animales y otros pájaros están “hasta en la sopa”, ya no en el campo sino en las ciudades. ¿Qué sucedió que pasamos de la casi extinción a la sobre población? Que el  algodonero casi desapareció y con él, las avionetas fumigadoras que arrasaban con la fauna..

Cada  motor a combustión  contamina,  también las motocicletas, moto taxis y taxis. Entonces, en la línea de los antis, ¿deberíamos  eliminarlos  porque envenenan el ambiente? Mientras sigamos siendo un país atrasado incapaz de dotar nuestras ciudades con sistemas masivos de transporte, que van a contaminar menos, debemos soportarlos porque necesitamos movilizarnos.

Olvidemos los motores a combustión  y fijémonos en las productivas vacas. ¿Quién creería que tan mansos animales causaran tanto daño al medio ambiente? Sin embargo,  en una sociedad abrumada por elementos contaminantes generados por el hombre, el 18% de las emisiones de gases que producen el efecto invernadero lo genera el ganado vacuno, proporción mayor  al efecto negativo del sector transporte sobre la atmósfera.

Resulta que, al digerir, las vacas liberan entre tres y cuatro litros de metano al día; y la actividad económica que se produce alrededor de estos animales, las ovejas y otros tipos de ganado, es también una de las principales causas de degradación de los suelos y los recursos hídricos. Entonces, en la línea de los antis, ¿eliminamos  bovinos y ovinos de la faz de la tierra? Tampoco podemos, porque los necesitamos para subsistir.

Cuando aparecen por nuestro territorio  el cura Arana  o Gregorio Santos, el aún presidente regional de Cajamarca, transportados en modernas camionetas, portando teléfonos celulares y vistosos relojes en las muñecas y, también, las  infaltables computadores portátiles;  preguntémonos cómo pueden ser tan descarados  viviendo de mantener  en la pobreza a innumerables compatriotas   oponiéndose a la minería; mientras, burlándose de sus seguidores, hacen ostentación de  bienes que existen gracias a la minería. Así, estos apóstoles del atraso y la pobreza, se zurran en los más necesitados que dicen defender.


Una digresión. El pasado miércoles 14, el diario “Correo”, publicó un  pormenorizado informe sobre la expansión del pensamiento extremista del MAS en nuestra serranía, contando con el apoyo de las autoridades locales y docentes vinculados a Patria Roja. ¡Vergüenza para Piura! ¿Cómo razonan estos docentes? Si exigen mayores remuneraciones y recursos para su sector, ¿por qué apoyan a quien se opone a la minería, la actividad que más aporta al Estado? Además, Santos, fundador del movimiento, no solo ha puesto a Cajamarca   al borde del colapso, sino que, según abundante información, no estaría haciendo honor a su apellido en el ejercicio de su cargo.


Nuestra actitud frente a la minería configura un sainete   vergonzoso. Primero,   fue echada  de Tambogrande una empresa minera por cuanto, vociferaron los cabecillas, solo sobre sus cadáveres habría minería. Luego, la minería informal, incontrolada y  contaminante sin medida,   se desarrolló velozmente y continúa haciéndolo tan vertiginosamente que  nadie puede detener. Así entonces,  ¿cuántos de estos valientes defensores de la prístina actividad agrícola han muerto hasta la fecha tratando de echar a estos vandálicos, destructores y contaminadores del límpido medio ambiente tambograndino? NI UNO SOLO.

El explosivo crecimiento de la minería informal en esa zona, entre muchas otras referencias, fue muy bien descrito por información publicada por el diario “Correo”  el pasado domingo 08 de julio, en declaraciones vertidas por un experto ambientalista  planteando lo siguiente:


·         Sapillica, más oro que Yanacocha. En Suyo y Las Lomas se obtiene 1 o 2 onzas de oro por tonelada de material, mientras en Yanacocha apenas se extrae 1 gramo.
·         Aproximadamente existen unos 12,000 mineros informales e ilegales causando gran perjuicio económico al Estado, estimándose una producción de 5 toneladas de oro, por lo que cada año se deja de recaudar US $ 19 millones por impuestos no pagados.
·         ¿Dónde están ahora las ONG´s que hace unos años apoyaron a la gente de Tambogrande que se opuso a la explotación de la minera Manhattan, y ahora han desaparecido del mapa ante tantos mineros informales que manipulan mercurio, que emanan gases tóxicos a la atmósfera y con sus relaves contaminan la represa de San Lorenzo?


Preguntémonos por qué somos tan quisquillosos contra la  minería formal, gran generadora de ingresos al erario, mientras, paralelamente, somos  despreocupados y complacientes ante  actividades de advenedizos  que, ellos sí, no solo degradan y contaminan nuestro mar, ríos, reservorios y el medio ambiente en general,  sino que no  aportan ni un céntimo por  canon. Sugiero que  cada piurano analice lo expuesto y obtenga sus propias conclusiones.

La presencia y multiplicación  del hombre sobre la tierra es un permanente atentado contra su existencia, de modo que la situación ideal para la conservación y regeneración de  nuestro planeta sería que no quede ni uno de nosotros sobre él, porque con la contaminación somos un binomio indisoluble.

No hace mucho, en un evento en el que se discutían estos temas, la disertadora preguntó: ¿Qué pasaría si, el día de mañana y como por ensalmo, no quedara ni una hormiga sobre la tierra?  Respuesta: sobrevendría el caos  al romperse la ordenada cadena biológica.   A continuación preguntó: ¿y qué  sucedería  si no quedara ni un  humano sobre la tierra? Maravilloso, pues la naturaleza se recuperaría y el orden, desaparecido el animal que lo altera,   retornaría sobre su faz.

Tomemos un caso muy cercano de las acciones  del hombre alterando  el medio ambiente: el Reservorio de Poechos. Sin duda nuestra actual expansión de la agricultura de alta tecnología y gran productividad, con el consiguiente bienestar para miles de trabajadores del campo y población en general, se debe a su construcción,  recordando que  por su  ubicación empezó a colmatarse apenas entró en operación en 1976. ¿Quién  negaría lo conveniente que fue  construirlo ante  las campañas  realizadas en el valle del Piura,  la irrigación de los arenales de Cieneguillo, añadida la regulación en el  valle del Chira, donde a veces faltaba agua para trasplantar en diciembre, mientras  ahora se hacen dos campañas anuales de arroz? Nadie lo haría, por lo que tal obra debería  calificarse como visionaria y magnífica.

Sin embargo, el reservorio  ha impedido que, hasta el año 2011, lleguen al mar 467.2 millones de metros cúbicos  de sedimentos que debió  transportar el río Chira. Este cambio, ¿habrá tenido algún efecto tanto sobre las costas como sobre la población ictiológica? ¿No será que una de las razones por las que nuestro antaño pródigo  y ahora empobrecido mar, además del saqueo del que es objeto por la sobre explotación pesquera, también está sufriendo las consecuencias de la privación del material que el hombre le quitó? Si las respuestas fueran positivas, comprenderíamos que todas las actividades humanas, para bien o para mal, afectan el medio ambiente.

Pero la construcción del  reservorio tuvo también otras consecuencias. La ciudad de Piura,   asentada sobre un terreno seco y árido que podía pasar años sin recibir agua, debido a esta  obra, devino en pantano  por las grandes masas de agua utilizadas en Cieneguillo y la   presa Los Ejidos, que creó una laguna aguas arriba de nuestra ciudad.

No olvidemos a la  antaño Perla del Chira, la ciudad de Sullana,  partida por la mitad por una quebrada originada  por el  desarrollo de Cieneguillo, que en vez de  diseñarse con técnicas adecuadas de riego, quizá por  premura  o desconocimiento,  se optó por el riego por inundación,  llegándose a producir el limón más caro y pernicioso del mundo según reportes técnicos del PECHP de la década de los 80, determinando que se aplicaba hasta 80,000 m3 de agua por hectárea.

Esta no fue  la única repercusión negativa de la represa de Poechos  contra la antaño Perla del Chira,  pues la construcción de la presa Sullana, creando una laguna frente a la ciudad, alterando así el curso natural  del río al que se vertían las aguas servidas sin  consecuencias negativas porque al discurrir  se auto limpiaba y regeneraba; ahora, continuándose vertiéndolas  igual que antes, ya no a un río sino a una laguna,                                                                                                                           la antigua perla devino en una ciudad en la que lo ideal sería no respirar.
                                                       
Entonces, ¿La construcción del Reservorio de Poechos fue bendición o maldición? Diría que, así como la  minería antigua era atrozmente contaminante al no considerar aspectos  ahora  determinantes en los estudios previos, habiéndose convertido en una de las actividades  que más protege el medio ambiente; así también la construcción del reservorio cuando no existía ni la idea del ahora insalvable  Estudio de Impacto Ambiental,  generó consecuencias  negativas no previstas ni consideradas. Finalmente y para terminar con esta reflexión, ¿actualmente sería factible construirlo considerando el tema de las  previas licencias sociales, por ejemplo, para erradicar una población  como se hizo con Lancones?

Reflexionemos sobre  una gran contradicción: de una parte construimos   grandes, costosas y, en cierto modo, perniciosas obras para ampliar las áreas agrícolas que demandarán gran cantidad de maquinaria y herramientas que obligadamente requieren de la minería para su fabricación; mientras, contradictoriamente, nos oponemos al  desarrollo de ésta. Entonces, ¿para qué  alteramos el orden natural si después                                          no vamos a contar con los medios materiales para aprovechar semejantes inversiones? Salvo que algún genio como los que abundan en Cajamarca y, desgraciadamente, también en Piura,  halle la forma de obviar en la agricultura el uso de bombas, tractores, arados, rastras, azadas, palanas, hoces, machetes y tijeras, entre otros muchos artefactos y herramientas metálicos.

¿Recuerdan cuando el  02 de junio del año 2000  se  derramaron  13.6 litros de mercurio a lo largo de 40 Km. de carretera en Choropampa, Cajamarca, cuando un camión de RANSA transportaba de Cajamarca a Lima 10 tanques vacíos de gas cloro de 600 Kg. cada uno, y 09 botellas llenas de mercurio (más pequeñas que un balón de gas) de 200 Kg. cada una? ¿Recuerdan también cómo,  con el cura Arana a la cabeza, quienes pugnan por mantener a cientos de miles de peruanos en el subdesarrollo y la pobreza le saltaron a la yugular a dicha empresa minera por cuanto, a través de sus actividades, vociferaron, atentaba contra la salud y la vida de las personas?

Muy bien, ¿quién fue  responsable por dicho accidente, la empresa minera  o la transportadora RANSA? Obviamente la segunda, por lo que las  protestas debieron dirigirse a desaparecer del país a todas las empresas dedicadas al transporte, por cuanto, por su negligencia y/o incompetencia, estarían envenenando y matando seres humanos por donde transitaran.   Sin embargo, como es fácil entender, no podemos eliminarlas, porque son indispensables para abastecernos de los bienes que consumimos.  
                         
¿Existe alguna diferencia  entre este  accidente y los tantos que provocan  anualmente las  empresas de transporte que nos movilizan por el país  ocasionando cientos o  miles de fallecidos y mutilados?  Ninguna, por cuanto por definición,  accidente es un suceso imprevisto o eventual, de modo que nadie, por mejor buena voluntad que tenga o cuidadoso que sea, está libre de ocasionarlos originando pérdida de vidas o daños irreparables a la salud. Entonces, si ni pestañeamos cuando  suceden en las carreteras, ¿qué motivó  el  escándalo generado por el  accidental derrame de mercurio en Choropampa? Conociendo  quienes estuvieron detrás, habría que preguntarse y/o investigar a qué bolsillos fue a parar la mayor parte del dinero de las reparaciones otorgadas por los tribunales,  considerando que los abogados foráneos  se embolsicaron .el 40%.


Planteadas estas reflexiones con el fin  de  hacer notar lo incongruentes que podemos ser, ahora nos referiremos a  condiciones  sumamente contradictorias  presentes en  nuestro departamento.

Qué satisfactorio  es ver las  multitudes paseando, divirtiéndose y gastando por los  modernísimos centros comerciales que han surgido en la ciudad de Piura, casi tan rápido como brotan los hongos  tras la lluvia.  Nos sentimos  vivir en el mejor de los mundos, más aún  al esgrimirse las tarjetas de plástico que dejaron atrás las  sucias monedas para pagar nuestros consumos. Casi pasó de moda el viejo anhelo de viajar a Miami, destino soñado antaño y ahora casi olvidado por la aparición  en nuestra ciudad  de estos benditos complejos que nos permiten gozar y disfrutar plenamente de la vida.

Esta formidable y ostentosa bonanza económica, reforzada por la abundancia de modernos, flamantes y costosos vehículos circulando por nuestras ciudades, además de la incontenible construcción de bellas y modernas casas y edificios por doquier, sin duda nos lleva a  pensar que vivimos en el mejor de los mundos.

No obstante, hoy por hoy, en nuestro propio departamento, existen miles o decenas o cientos de miles de piuranos que se debaten en la pobreza extrema careciendo de los más elementales servicios y ventajas que sí están a disposición de muchos de nosotros. Me refiero, como se comprenderá, a los habitantes del ande asentados mayoritariamente en las provincias de Ayabaca y Huancabamba, quienes, urgidos por la casi absoluta insatisfacción de sus necesidades más elementales,  migran a las ciudades costeñas.

Esta situación origina un perfecto círculo vicioso consistente en el despoblamiento de las alturas y la  saturación de las ciudades que se ven incapaces de proveer los servicios que esas personas, lógica y justamente, vienen a demandar. Entonces, mientras el ande se  va despoblando, las ciudades colapsan por la súbita e imparable afluencia  de quienes bajan con ilusiones que no  podrán colmar.

Pero, ¿acaso será cierto que nuestra serranía, para quienes son creyentes, fue dejada de lado a la hora que Dios creó el mundo? ¿Es que él, en su infinita sabiduría e inescrutable modo de guiar nuestra existencia no previó medio alguno para que aquellas personas dispusieran de alguna posibilidad o medio que les permitiera, por lo menos, vivir dignamente?

Felizmente, no solo no los olvidó sino  fue enormemente dadivoso porque puso a su disposición ingentes y valiosos recursos minerales fundamentales para que nuestra vida, tal cual la disfrutamos, continúe en marcha. Entonces, es lógico preguntarnos, ¿cómo es posible que con  semejante potencial de riqueza a su disposición sufran tantas miserias y penurias? ¿Es que acaso la ignorancia y/o  perversidad guía a sus líderes y gobernantes locales que los obligan a continuar  en condición de auténtica  indigencia?

¿De qué fuente de riqueza  hablamos? Por ejemplo, del proyecto Río Blanco ubicado en el cerro Henry´s Hill, en una zona alejada de áreas agrícolas o ganaderas en el distrito Carmen de la Frontera de la provincia de Huancabamba, siendo las comunidades más cercanas Yanta y Segunda y Cajas.  El caserío aledaño al yacimiento tiene el mismo nombre,  Río Blanco. Sin embargo, cinco horas de recorrido distancian uno del otro. En consecuencia, a diferencia, por ejemplo, del caso de Tambogrande, donde un rico yacimiento de oro se ubica bajo la propia ciudad, lo que, obviamente, hace prácticamente imposible su explotación formal, porque  de la ilegal ¿quién  sabrá?; en este caso no habría argumentos   para objetar su explotación, excepción hecha, la irracionalidad y/o intereses ocultos que, de santos, no  tendrían nada.


Este yacimiento ya fue estudiado entre los años 2004 y 2006, determinándose lo siguiente:

·         Contiene 1257 millones de toneladas de Cu y Mo con una ley variable entre el 0.5 y el 1.2 %; con 0.8% de Cu equivalente.

·         Su producción proyectada anual es de 220,000 Ton. de cobre y 2,500 Ton. de molibdeno

·         El período de explotación  de 25 años
 

                                                           Cobre (Ton)              Molibdeno(Ton)

Producción Perú                             1’235,000                      19,000      

Producción R. Blanco                      220,000                         2,500

% R. Blanco/Perú                              17.81                           13.1



Al afirmar que su explotación no entraña peligro alguno al medio, lo hago como persona más o menos normal  que, por ejemplo, jamás diría que es de noche cuando el sol brilla en lo alto del firmamento, que es exactamente lo que hacen  los opositores a explotar tan formidable recurso minero, cuando afirman que contaminará las fuentes de agua que irrigan nuestros  valles costeños, situación  absolutamente imposible,  salvo que ellos hubieran hallado la forma de hacer que las aguas discurran de abajo hacia arriba.

Este proyecto no tiene ni puede tener relación alguna con las cuencas del río Chira o del río Piura que desembocan en el océano Pacífico, al estar ubicado en la otra vertiente de la cordillera de los Andes: la del Atlántico.  Solamente tomará agua de la quebrada El Gallo, perteneciente a la cuenca del Río Blanco, río fronterizo que no comparte aguas con la costa de nuestra región, ya que discurre hacia el río Canchis para desembocar al Chinchipe y continuar hasta el océano Atlántico.

Para mayor abundamiento, como suelen decir los letrados, los tan mentados páramos, caballo de batalla de los antis piuranos para oponerse a cuanto proyecto de explotación minera  pudiera mencionarse, así estuviera  ubicado en el más árido de los desiertos;  se forman a partir de una altitud de 3,500 msnm. Así, por ejemplo, Las Huaringas están m/m a 4,000 msnm, mientras el proyecto Río Blanco se ubica entre los 2,200 a 2,800 msnm y a 21 Km. de distancia en línea recta hacia el este de Las Huaringas. En conclusión, no hallo el término adecuado para calificarlos cuando repiten, como auténticos papagayos,  que la explotación del citado yacimiento contaminaría nuestros ríos costeños.

A propósito, ¿qué dicen o hacen estos  opositores amparados en  semejante  argumento, respecto de la imparable, incontrolada, ilegal y contaminante minería informal, a la que ya nos hemos referido, en permanente expansión, en las partes altas de las cuencas de los ríos Quiroz y Chipillico? Entonces, si ni dicen ni hacen nada para erradicar tan nociva actividad, ¿cómo pueden tener la desfachatez de esgrimir argumentos falsos de toda falsedad, impidiendo que nuestra gente del ande  disponga de los recursos  requeridos  para salir de la pobreza y abandono ancestral en que se encuentra?


Como la crítica por sí sola no sirve para nada sin  aportar ideas y propuestas,  consignaré algunas para los piuranos de la sierra, en especial autoridades y personas representativas  preocupadas por  el progreso de los suyos:



·         Si aparecieran por sus lares personas bien pertrechadas, con o sin sotana (figurativamente, porque su uso casi desapareció décadas atrás), haciendo ostentosa gala de los bienes que provee la minería, sanos, rozagantes y, obviamente, muy bien alimentados y mejor trajeados; instándolos a que no permitan explotar vuestros recursos mineros porque morirá vuestro ganado y se contaminarán vuestras tierras; échenlos, por cuanto sus intereses no tienen nada en común con vuestro bienestar y desarrollo..

·         Estudien y analicen a vuestros líderes opositores a la minería porque tal actitud, necesariamente, se debe a una de tres razones: 1º) Alguien los tiene comprados (metiéndoles dinero en sus sucios bolsillos) para defender intereses  que no son los vuestros;  2º) Porque no quieren “moros en la costa”, lo que haría peligrar sus  lucrativos e ilegales negocios propios como podrían ser, por ejemplo,  la minería informal e ilegal, muy extendida en la zona del río Santiago, o el malhadado tráfico de drogas,  o 3º) Son retrasados mentales sin remedio.

·         No se dejen engatusar con el cuento de que la empresa minera Río Blanco Copper S.A. es un engendro diabólico que quiere robarse lo que es de ustedes. No es así, pues, simplemente es una empresa como cientos de miles que existen en el mundo dedicadas a infinidad de actividades, todas las cuales tienen como meta ganar la mayor cantidad posible de dinero. En este caso, es una minera   titular del denuncio sobre el yacimiento de cobre y molibdeno ubicado en vuestro territorio, en el que no podrá poner un dedo (como les consta), mientras ustedes no lo permitan.      

·         Analicen vuestra situación: ¿Cómo andan  en cuanto a servicios de salud, educación, saneamiento, nutrición, comunicaciones, etc.? Si consideran que son una maravilla y vuestro nivel de vida es envidiable, tendrán toda la razón si mandan a rodar a la empresa porque no quieren correr ningún riesgo que pudiera provenir de la minería.

·         Pero, si el análisis los hiciera comprender que vuestras condiciones de vida son desastrosas y del Estado, por más ofrecimientos que reciben en cada proceso electoral, jamás llegará el remedio para eliminar vuestros males; ¿acaso el más elemental sentido común no les aconsejaría sentarse a conversar con dicha empresa y oír que beneficios les ofrece a cambio de vuestro permiso para explotar el yacimiento?


·         ¡Cuidado! No me mal interpreten  creyendo que los ejecutivos de la empresa son santos que, cuando mueran, irán al cielo con zapatos y todo. Probablemente sea todo lo contrario, porque sin duda estarían felices si ustedes les dan el visto bueno a cambio de un chupete por persona. Entonces, conversar sí, pero sin dejarse meter el dedo en la boca y exigiendo lo máximo para ustedes, sin olvidar aquello de que si la pita se estira demasiado, se rompe.

·         Sean imaginativos y busquen lo mejor y más conveniente.  Supongamos que llegaron a un entendimiento con la empresa con lo que habrán salvado el primer escollo. ¿Cuál sería el siguiente?  El Estado. Así,  si la ley dice que el 50% del monto del impuesto a la renta  pagado por las empresas mineras, se entregará a la región en la que se ubica el yacimiento y, asimismo, éste se atomizará repartiéndolo, desperdigándolo y, finalmente, malgastándolo; entre universidades y gobiernos regional y locales; les aconsejo adoptar la siguiente posición:


EXIGIMOS QUE EL ÍNTEGRO DEL IMPUESTO A LA RENTA QUE PAGUE LA EMPRESA EXPLOTADORA DE NUESTRO YACIMIENTO, SE DESTINE A INVERSIONES EN LAS PROVINCIAS DE AYABACA Y HUANCABAMBA POR UN PLAZO DE DIEZ AÑOS. ASÍ, OBTENDREMOS ALGO DE JUSTICIA POR EL ANCESTRAL ABANDONO AL QUE HEMOS SIDO SOMETIDOS DESDE LA FUNDACIÓN DE LA REPÚBLICA.


ASIMISMO, DEBERÁ CREARSE UN ENTE TÉCNICO ABSOLUTAMENTE DESPOLITIZADO E IMPOSIBLE DE SERLO EN EL FUTURO, QUE MANEJARÁ ESTA MASA MONETARIA TENIENDO COMO META, ÚNICAMENTE, LO MEJOR PARA EL DESARROLLO INTEGRAL DE  AMBAS PROVINCIAS.

Me he referido al tráfico de drogas. ¿Lo hice porque se me ocurrió o por lanzar un infundio como acostumbran hacer los antis? Nada de eso, pues, simplemente, me he remitido a un pormenorizado informe publicado por el diario Perú 21 el pasado martes 13 donde el especialista en temas de narcotráfico, Jaime Antezana, revela que hay sembríos de coca, amapola y marihuana en La Libertad, Piura, Cajamarca y Ancash.

¿Qué dice respecto de Piura el reconocido especialista?


EN PIURA EXISTEN SEMBRÍOS DE AMAPOLA EN LAS PROVINCIAS DE HUANCABAMBA Y AYABACA.


Entonces, si así fuera, ya sabemos que lo menos que podrían desear estos delincuentes narcotraficantes, si de veras existieran como  señala el experto, es que el territorio se abra (recordemos que ahora, prácticamente, es zona liberada a la que es muy difícil el ingreso de extraños) porque el malhadado negocio se les complicaría o acabaría.

Ni qué decir de lo formidable que sería la explotación de este yacimiento para potenciar las comunicaciones,  pues, de la precariedad actual, pasarían a contar con carreteras de primer orden, como ha sucedido en todos los departamentos donde la minería viene prosperando, lo que les abriría otra formidable fuente de ingresos dada vuestra maravillosa geografía: El Turismo, con la oferta adicional de Aypate como destino turístico a nivel mundial.

Finalmente, no puedo terminar esta disertación dejando de mencionar a quienes bien podríamos llamar el trío fantástico anti minero de Huancabamba.  Curiosamente, los tres  son funcionarios estatales: don Wilson Ibáñez, alcalde provincial de Huancabamba; don Ismael Huayama, alcalde distrital de Carmen de la Frontera y don Leonidas Huayama, congresista de la República por Piura perteneciente al partido del señor presidente de la República.

De hecho, por sus cargos, todos ellos disfrutan de ingresos económicos fabulosos comparados con la inmensa mayoría de sus representados, por lo que tendría que llamarnos la atención que, sin proponer soluciones o alternativas diferentes para elevar el nivel de vida de su gente, se opongan radicalmente a la minería. Esto sería mucho más grave cuando los hermanos Huayama, según diversos reportes e informaciones, tendrían activa participación en la pujante minería informal realizada en la provincia.

También tengo a la mano el certificado de movimiento migratorio de don Wilson Ibáñez , el que acredita que es una persona de recursos, pues entre el mes de diciembre del 2005 y el pasado 05 de julio del presente, ha visitado Holanda y España en el viejo mundo  y varias veces Colombia, Ecuador y Bolivia.

Personalmente me atrevería a afirmar que estas personas, así como el ya mentado Gregorio Santos, antes que preocuparse por el bien común, razón por la que cobran del Estado, priorizan sus propios intereses y apetitos.

Hermanos de las alturas: En vuestras manos está salir de la pobreza.


Muchas gracias.
DON ALBERTO BENAVIDES DE LA QUINTANA

Luis Gulman Checa

Es difícil aceptarlo pero desgraciadamente nadie puede vivir eternamente, a pesar que algunas personas, por las cualidades con que Dios las dotó, nos hacen desear que permanezcan para siempre con  nosotros para que continúen guiándonos y enseñándonos  con su ejemplo cómo  comportarnos, justa y cabalmente, sea cual fuere el ámbito o actividad en el que nos desempeñemos.

Pocos días atrás dejó de existir Don Alberto Benavides de la Quintana y, cuando estas líneas sean publicadas, a pesar de lo mucho que se habrá dicho y escrito acerca de este hombre excepcional y fuera de lo común, tengo la plena seguridad que no se le habrá hecho justicia a lo que fue su vida dedicada a servir a su patria y, como consecuencia, a la pléyade de compatriotas, especialmente de las zonas más deprimidas y abandonadas del Perú; en el desarrollo de su pasión por la Geología que lo llevó a explorar y explotar, hasta donde le fue posible, una mínima parte, como solía decir, de las ingentes riquezas minerales repartidas en el  territorio nacional.

Don Alberto, con toda justicia, era y ha sido unánimemente reconocido tras su deceso, como el padre de la minería moderna en el Perú. Entendiendo que la extracción y uso de los metales son tan viejos como el hombre, al hablar de modernismo me refiero a que él jamás vio a quienes moraban en el ámbito de sus minas, como sucedía antaño,  como seres inconvenientes o entes descartables. Todo lo contrario, pues siempre, en cada uno de los emprendimientos que puso en marcha, tuvo muy por delante  mejorar, sin escatimar recursos, las condiciones de vida de sus nuevos vecinos y socios, pues así los veía desde que trabajaban juntos en una tarea fundamental para el desarrollo del país y la humanidad.

¿Quién, en su sano juicio, puede negar la veracidad de su aserto de que la minería lleva desarrollo allí donde se realiza? Nadie con un mínimo de patriotismo o sentido común puede estar en contra de esta clara verdad, naturalmente  referida a la actividad legal y formal mas no a la otra minería, aquella que los mal llamados “Ambientalistas” no quieren darse por enterados de su existencia a pesar que destruye y asola el medio ambiente. Así, ¿qué les habrán  inoculado en sus mentes a estos traidores a la patria que, irracionalmente, gritan y claman para impedir el desarrollo de  la buena minería, sabiendo que la misma elevará el nivel de vida de cientos de miles de personas que viven bajo paupérrimas condiciones y a las que ellos, contradictoriamente, dicen defender?

Personalmente tuve la fortuna de conocer a Don Alberto, estableciéndose entre nosotros una relación abierta y fluida. Me impactó mucho cuando se refirió a Piura con cariño  mencionando a su tío Alfredo. ¿Quién era ese tío? El mismo que tuve yo, Alfredo Checa Eguiguren, hermano de mi madre y esposo de su tía carnal, Doña Rosa Benavides. Rato después, con los ojos húmedos, recordó a su querido primo Pipo, muerto en Piura. ¿Quién era Pipo? Su primo hermano, Felipe Malachowski Benavides, casado con mi hermana Marcela y muerto trágicamente en Ventarrones, Sullana, siendo un muy joven y exitoso Ing. Agrónomo al frente de la gran hacienda San Jacinto en el Chira.

Me contó que desde joven había oído hablar al tío Alfredo de la irrigación del valle del Piura trasvasando agua del río Chira y desde esas épocas tenía la idea de hacer algo por Piura. Así,  recién el año 2006,  la empresa que él creó más de 60 años atrás, Cía. de Minas Buenaventura S.A.A., obtuvo un denuncio en  territorio  de la Comunidad Campesina Apóstol Juan Bautista de Locuto, una zona abandonada por el Estado donde la gente  ni siquiera disponía de agua para beber. Me dijo: Lucho, ¿te imaginas cómo podríamos mejorar las condiciones de vida de esos piuranos si exploráramos y, ojalá, pudiéramos explotar ese yacimiento soterrado a  500 metros de profundidad? Añadiendo que la gran dificultad que debía sortear era obtener el agua requerida para la explotación, la que necesariamente tendría que buscar en el sub suelo.

Puede parecer raro, especialmente para muchos jóvenes que, como Rico Mc Pato, caminan con el signo de dólares impreso en sus pupilas, pero pienso que  a Don Alberto  nunca lo motivó el deseo o interés de acumular riquezas para sí, pues, si tal hubiera sido su móvil, y si desde  décadas atrás ya era inmensamente rico, ¿por qué continuó, hasta el último día que le fue posible, “arriba del caballo” o “conduciendo el timón”, como se prefiera,  en su propia y recordada oficina?

¡Simple y llanamente porque fue un apasionado por coadyuvar al desarrollo de su patria, también la  nuestra, el Perú!

Tenemos que confiar en que su legado ha quedado en buenas manos y los frutos de sus siembras continuarán dándose para beneficio de tantos peruanos necesitados y, finalmente, del país en su conjunto.


A PROPÓSITO DE LA SEQUÍA: ¡APRENDAMOS DE LOS AREQUIPEÑOS!

Luis Gulman Checa

¿Recordamos la reacción de los arequipeños cuando  el régimen de Toledo  pretendió privatizar sus plantas generadoras de electricidad? ¿Se concretó tal venta o, más propiamente, regalo al sector privado? Por supuesto que no. ¿Por qué? Por cuanto la gente de allá parece de otro planeta,  porque todo lo que existe en Arequipa lo sienten como propio  y lo defienden a muerte. Por ello, las generadoras, felizmente para ellos, quedaron en poder del Estado.

Tengo a la vista el magnífico (por lo completo) titular de primera plana de este Diario del 19.02.2014, informándonos de las consecuencias que  afrontaremos por la sequía que se ha abatido sobre nosotros,  enterándonos que las  tres Centrales Hidroeléctricas (CC HH) anexas al sistema Chira Piura, por el cierre  de las compuertas del reservorio de Poechos,  no generarán  durante ocho días a partir del lunes 24 de febrero.

La paralización de éstas no significaría ningún problema si tuviéramos una pizca del temperamento arequipeño, por cuanto  la potencia perdida se podría haber reemplazado con una parte de la producida por nuestras propias Centrales Térmicas de Piura, Sullana y Paita, cuya capacidad instalada  superaba la de las tres CC HH que  paralizarán.

Sin embargo, en Piura, durante el período que bien podríamos calificar como la “Época de la barbarie”, cuando se desató la fiebre privatizadora al extremo que el Estado casi “quedó en cueros”; las tres plantas  fueron subastadas y adquiridas por una empresa norteamericana, sin duda a cambio de unos  centavos.   No obstante, obtuvo grandes ganancias durante el tiempo que estuvo obligada a mantenerlas operativas por cuanto cobraba muy bien funcionaran o no.  Lamentablemente, expirado el plazo contractual fueron abandonadas.

¿Y ahora?  Los piuranos, por “caídos del palto”, nos quedamos sin amparo ante una coyuntura previsible desde que el clima varía entre períodos secos y lluviosos. Entonces, como las CC HH, para generar requieren abundante  agua, cuando impera la sequía deben paralizar, situación en la que entran a operar  las térmicas (cuando existen) que solo requieren de petróleo.

¿Acaso hospitales y aeropuertos no cuentan con grupos de emergencia para generar electricidad ante eventuales fallas del sistema? Por la misma razón, nuestras centrales térmicas jamás debieron abandonarse, porque si bien nadie sabe cuándo se van a necesitar, habría que ser ingenuo para no saber que, necesariamente, en algún momento nos tendríamos que haber visto obligados  a recurrir a ellas, como es el caso actual. Sin embargo, ya no están. ¿Quién va a responder por este atentado contra nuestra seguridad energética? Como siempre, el Gran Bonetón, es decir, nadie. No hay que ser adivino para saber que en esta semana abundarán los “apagones” por falta de potencia.

¿Qué sucederá con nosotros si, como es perfectamente factible, el 2014 resultara similar al súper seco 1968? Si así fuera, ¿acaso no sería lo más probable que tuviera que suspenderse la derivación de agua del Chira al Piura, por lo que por lo menos dos de  las CC HH tendrían que dejar de funcionar?

El suscrito no es experto en esta materia ni en ninguna otra, ni mantiene   relación alguna con el sector público, por lo que, estimado lector, no tendría usted porqué alarmarse ante los agoreros comentarios señalados líneas arriba, por cuanto podrían estar errados y, sinceramente, quisiera que así fuera.

No obstante y para salir de dudas sería bueno que algún funcionario idóneo y competente en el tema nos  informara, por ejemplo, el estado en que se encuentra la Planta Térmica de Sullana que fuera propiedad de Electronoroeste S.A., la misma que, al momento de ser ¿vendida? mediados los 90, contaba con cuatro motores ALCO perfectamente operativos con una potencia instalada de 10  MW. Entonces, ¿cuál es la potencia operativa actual de dicha Planta? Roguemos a Dios que la respuesta sea: 10 o más  MW y así todos seríamos felices.

Para cerrar por hoy, un comentario referido a que se procederá a perforar/rehabilitar pozos para enfrentar la sequía. ¿Recordamos la agresión chilena del siglo antepasado que nos agarró desarmados? ¿Fue una solución eficaz el urgente viaje del señor Prado a Europa para adquirir barcos y armamento? Me parece que lo mismo sucedería con el irreal y demagógico planteamiento citado.

Blog del autor: legulmanch.blogspot.com









LAS BANDAS

Luis Gulman Checa

Ojalá el presente tratara de una grata reminiscencia, como  las bandas que antaño nos alegraban la vida en la plaza de Armas interpretando alegres piezas musicales. Lamentablemente, debo referirme a otras, las conformadas por delincuentes, organizados e ilegalmente protegidos,  para perpetrar latrocinios de toda especie  con absoluta falta de respecto por la vida y paz ajenas.

La reciente captura de  integrantes de la banda  “La Cruz de Piura”, efectuada por  fiscales y policías venidos de Lima para el efecto, así como las informaciones  sobre los delitos que cometieron; me ha revelado hasta qué punto la corrupción ha infectado el aparato público en general, pues, lo que recién ha salido a la luz, lo oí relatar, con “pelos y señales”, dos o tres años atrás, a un dilecto amigo, vecino y fundador de Cossío del Pomar colindante con Tacalá,  incluidos los nombres de los implicados, como  el del exárbitro.

También se refirió al hermano de una autoridad local, quien  se había apropiado de  terrenos en la zona e ingresado maquinaria a los  mismos, señalando  que dicha persona gozaba de la protección  de bandas delincuenciales.

Si un ciudadano común  estaba informado al detalle de estos hechos, los cuales también eran ampliamente conocidos en el barrio, ¿cómo así, no solo las autoridades competentes estaban ajenas a estos hechos, sino también el gran gremio de los periodistas, que, según las columnas de algunos diarios, saben hasta qué color de  ropa interior  usan ciertos funcionarios?

Sin duda, no siempre es la corrupción lo que silencia o inhibe a quienes deberían actuar de oficio, sino la  indiferencia y/o falta de compromiso para con la sociedad en su conjunto de tantos que, viendo únicamente su propia conveniencia y tranquilidad, callan y miran hacia otro lado en vez de acusar. Me refiero,  especialmente, a  fiscales, policías y periodistas.

¡Cuántas veces  aluciné haber ganado un  Tinkazo  para construir un edificio!  ¿Por qué? Por cuanto me repugna  informarme sobre  extorsiones de los llamados “Sindicatos de Construcción Civil”  a contratistas y propietarios exigiendo pagos para “permitirles” construir. Como “una cosa es con guitarra y otra con cajón”, ruego  poder enfrentar a la bestia para saber si, en el terreno de los hechos y la verdad, opto por “bajarme los pantalones” o la enfrento con todas las armas.

Está claro que cada día gana terreno la  “Ley de la selva”, no solo  gracias a  la proclividad generalizada de mirar hacia otro lado para no comprometernos, sino que, por lo general, estos pícaros  son reputados como “hábiles empresarios”.



Ante estos hechos, cada vez creemos menos en el Estado  e inconscientemente  empezamos a dudar quiénes son los que están en el camino correcto: si los delincuentes o el resto de ciudadanos reputados como más o menos normales. Así, luego de constatar la realidad,  va creciendo la delincuencia por cuanto enriquece a los malos sin ser reprimidos ni castigados.

Ante esta realidad no veo  posibilidades ya no de erradicar la corrupción, sino de que por lo menos disminuya. ¿En qué me baso? En que el combate contra estas lacras debe realizarse de arriba hacia abajo, y, fatalmente, en el Perú no solo se libera a los  de arriba, sino que, en el colmo de la desvergüenza, algunos hasta aspiran a gobernarnos.

Precisaré,  a modo de ejemplo, el   caso Comunicore. Para cualquier persona  pensante, este robo contra la Municipalidad de Lima, sacado a la luz por el diario PERÚ.21 cuando era dirigido por Fritz Du Bois, configuró un claro latrocinio  de más o menos  24 millones de soles  cuando era alcalde Luis Castañeda Lossio. Sin embargo, el Tribunal Constitucional, pese a que el alcalde, en su calidad de Jefe del Pliego,  responde por todo lo actuado en su gestión;  lo ha  declarado “limpio de polvo y paja”. Ello sería aceptable si, paralelamente, lo hubiera descalificado para ejercer cualquier cargo público por supina deficiencia mental, por cuanto habría que ser tarado para no darse cuenta que sus funcionarios de confianza estaban perpetrando tremendo  robo contra la entidad.

Entonces, si a los peces gordos se les premia con  impunidad total, ¿con qué autoridad moral vamos a sancionar a los pequeños delincuentes, comparativamente, como serían estos emprendedores  muchachones castellanos?

Si usáramos la misma vara para medir a las autoridades, deberíamos dejar de  mortificar a la señora Ruby a quien atormentamos  por insignificantes deslices, como  adelantillos no previstos y/o ligeros asomos de nepotismo.

Blog del autor: lgulmanch.blogspot.com