COP20: FÁCIL  DIAGNÓSTICO, IMPOSIBLE SOLUCIÓN

(03 diciembre 2014)

Luis Gulman Checa

La COP20 es una asamblea mundial convocada porque el planeta tierra está enfermo y,  de no tomarse las medidas necesarias, morirá más pronto que tarde.

¿Qué diferencia a una persona diagnosticada como diabética del planeta amenazado por el calentamiento global? Nada. Ambos están enfermos y, según cumplan o no las indicaciones de los médicos sanarán, morirán rápido y/o agonizarán lentamente.

Siguiendo con la comparación, ¿qué diríamos de un diabético  atiborrándose de dulce, tirado en su cama sin hacer  ejercicio?  Que desea morir, por cuanto tales actitudes van en sentido contrario a la recomendación del médico.

Ahora miremos el planeta asolado y contaminado por el hombre, bestia destructiva por propia naturaleza, que cada día genera más y más  los denominados “gases de efecto invernadero” que propician el incesante y permanente incremento de la temperatura, lo que, según los que saben, hará colapsar el planeta y desaparecer la vida humana.

Entonces, si así son las cosas, recordando al diabético que no debe ingerir dulces,  también el hombre debe reducir al mínimo la generación de  tales gases por un elemental sentido de supervivencia.

Siendo  los motores de combustión interna grandes contaminantes, la tendencia  debiera ser irlos eliminando. Ejemplo: optimizar el transporte público desterrando el petróleo.

Además, deviene en imprescindible eliminar prácticas y costumbres contaminantes y absolutamente innecesarias, como, por ejemplo, las irracionales competencias automovilísticas, las que, dadas las circunstancias, bien podríamos definir  como el sumun de la estupidez humana: un gran número de vehículos quemando petróleo y contaminando el ambiente sin ir a ninguna parte.

¿En qué medida contribuirán al calentamiento de la tierra los miles de aviones que están en el aire permanentemente? Para reflexión, ¿son imprescindibles para nuestra existencia los varios torneos futbolísticos que se dan simultánea y permanentemente en el mundo y que requieren gran cantidad de vuelos?


Como no hay ninguna posibilidad que el hombre adopte alguna de las tantas medidas que el sentido común recomienda, el planeta no tendría salvación.