ALCALDE: TRABAJE

 

(Piura, 27septiembre 2022)

 

Luis Gulman Checa

 

“El Tiempo”,  en portada de la edición de la fecha, nos informa que el alcalde provincial de Piura, quien no es piurano, está pidiendo a la población que lo eligió para trabajar y gestionar en su beneficio, manifestarse en las calles (¿rompiendo lunas y quemando vehículos?) exigiendo a las autoridades piuranas se unan para pedir que la seguridad sea declarada en emergencia.

 

¿Habrá planteamiento más absurdo e irracional?

 

En primer lugar, la autoridad máxima de la ciudad es él mismo, es decir, en buen romance, nos está pidiendo salir a las calles (¿imitando las huestes de Atila?) para pedirle que se desahueve y cumpla con su deber al ser (fatalmente) el representante, guía, adalid y líder de los habitantes de la ciudad de Piura.

 

Cuando nos pide armar un laberinto para lograr que las autoridades se unan, ¿a cuáles se refiere, además de a él mismo? Imagino se referirá al gobernador, muy importante cargo con funciones definidas entre las cuales no se encuentra la seguridad, sino, fundamentalmente, administrar correctamente los recursos que recibe para  potenciar tanto el bienestar como el desarrollo de la población departamental. Sin embargo, para nuestra desgracia, desde años atrás y debido a la estulticia de la gran mayoría de electores, hemos aupado incompetentes, ignaros y, Dios sabrá, corruptos.

 

Respetuosamente, me permito sugerirle al alcalde dirigir sus ojos a la RAE buscando el significado del término gestionar: “hacer las gestiones necesarias para conseguir o resolver una cosa”. Así, entonces, es él y solo él quien ha debido, desde que consideró que la inseguridad subía como la espuma, moverse, figuradamente, más que la recordada Tongolele, ante todas las instancias de gobierno que tenían en sus manos declarar tal emergencia.

 

Sin embargo, pasemos esta página e imaginemos que la tan ansiada emergencia ya fue declarada. ¿Ese simple hecho abatirá, de la noche a la mañana, la maldita y desenfrenada ola de asaltos, robos y crímenes que vienen afectando no solo a la ciudad sino a todo el departamento?  Teniendo en cuenta que las “emergencias” usuales son declaradas cuando acaece alguna CATÁSTROFE, como lluvias fuertes o sequías prolongadas, tienen como único fin que  autoridades y funcionarios gasten sin orden ni control pasando por alto licitaciones y otros, ¿qué implicaría tal declaratoria?

 

Pasando a otra página, comprobaremos que la MPP, es decir, el alcalde, ni siquiera es capaz de hacer respetar sus propias disposiciones que  debe  imponer a rajatabla, como, por ejemplo, prohibiendo  el transporte de pasajeros en motocicleta como también lavar vehículos en el centro de la ciudad. Entonces, siendo incapaz de cumplir  tareas de su propia y exclusiva competencia, ¿para qué diablos pierde tiempo y esfuerzo en asuntos que no son de su incumbencia?

Una pregunta final:

 

¿La PNP continúa vigente o sucede que sus miembros fueron, figurativamente, emasculados?