CONTRALORÍA: VIRTUAL CARABINA DE AMBROSIO

 

(Piura, 17 abril 2023)

 

Luis Gulman Checa

 

¿Sería aceptable que un medio de comunicación publique en portada la opinión de un zapatero remendón referida al pronóstico del crecimiento del PBI?

 

Inimaginable. Sin embargo, tal pachotada apareció en la edición de “Correo” de la víspera:

 

ALERTA EN EL RÍO PIURA.

 

La Contraloría advierte que el río Piura podría desbordarse con un caudal menor al histórico debido a la sedimentación que presenta producto de las lluvias. Incluso, a la altura del futuro puente Integración, se ha detectado un estrangulamiento, lo que originaría un represamiento de las aguas.

 

La función de tal entidad es salvaguardar el buen uso (ni robos ni ineficiencias) de los recursos del erario, para lo cual cuenta en cada ente estatal (al menos así era cuando estuve montado en el caballo) con una oficina y personal que debe permanecer escrutando, permanentemente y con los ojos bien abiertos, las acciones de los responsables de la entidad para que no se desvíen ni un milímetro del camino, es decir, CERO PENDEJADAS DE TODO CALIBRE.

 

Pondré un ejemplo para que la idea quede clara. Imaginemos que en una entidad en el proceso de ejecución de una obra, al designar la Comisión de Licitación se incluye una persona no idónea para tal tarea. ¿Qué debería hacer,  en el término de la distancia, el “men” de Contraloría? Comunicar al Contralor tal desatino para objetar tal designación. Si así hubiera actuado todos los años pasados, poniendo el parche antes que saliera el chupo, en Piura no hubiera ni una obra que ya consumió ingentes recursos y, mientras están tiradas y abandonadas, otras, en la práctica, ni siquiera existen.

 

Prefiriendo ser calificado de necio antes que de omiso, buen ejemplo del último caso  es la Desviación del Río Huancabamba al Valle del Alto Piura. Descomunal robo que, bien mirado, deja al “Ente de Control” más sucio y pestífero que palo de gallinero por ser el real responsable de tremenda estafa mezcla de ignorancia y corrupción. ¿En qué me fundo para formular tal afirmación?

 

En que es incalificable que Contraloría permaneciera ciega, sorda y muda cuando se licitó la ejecución de una obra valuada en cientos de millones de soles basada en un “Expediente Técnico” valuada m/m en S/. 700,000.00, siendo sabido y aceptado que el valor de los Estudios de una obra, como, por ejemplo, las Tres Etapas del PECHP, asciende al 5% de su valor.

 

Agigantando la punible y criminal negligencia de Contraloría, tal barbaridad sucedió dos veces, y, según aparece en los medios de vez en cuando, se estaría pretendiendo tropezar con la misma  piedra por tercera vez.

 

Ante tales hechos, debemos formularnos la siguiente pregunta:

 

¿Estará en el ente de control sacando su tajada de la pestífera torta?