Luis Gulman Checa
No es objetivo del presente respaldar al Gobierno Regional de Piura y su inútil Unidad Ejecutora (por no haber sido capaz de preparar el Expediente Técnico ni asumir el Proceso de Selección) por la forma como vienen conduciendo el Proyecto; sino, formular algunas precisiones y aclaraciones al Ing. lambayecano Jorge Enrique Briones Gutiérrez, quien está bombardeando - haciendo constante uso del Internet - el anhelo de los piuranos de bien de desarrollar el Alto Piura sin estafar al fisco ni llenarse los bolsillos con dinero sucio, como, fatalmente, sí sucedió en Olmos y él mismo así lo reconoció y lamentó, llegando, incluso, a señalar a Yehude Simon como el principal responsable, augurándole que algún día, más temprano que tarde, pagaría por ello.
Antes de entrar en materia es necesario recordar cuál es el problema y quiénes lo originaron. La discusión nace porque una banda de sinvergüenzas - para no decir rateros - se coludieron para robarse toda el agua del piurano río Huancabamba para irrigar las Pampas de Olmos (pobladas sólo por zorros y lagartijas), con lo que condenaban a la pobreza eterna a las decenas de miles de seres humanos asentados en el Alto Piura, privándolos de la única fuente disponible de agua para mejorar y regular el riego en su feraz y desarrollado valle.
El citado profesional, de experiencia y altos merecimientos, ha desplegado amplia y variada gama de cuestionamientos al actual Proceso de Selección del contratista para ejecutar el Alto Piura, asistiéndole parcialmente la razón. Así, coincido plenamente con su apreciación que el Expediente Técnico, bajo el que éste se puso en marcha a cargo de Unops, no sirve absolutamente para nada, lo que podría terminar, Dios no lo quiera, en otra monumental estafa al fisco - como Olmos - con bolsillos privados llenos de dinero público. Esta fatal circunstancia, de darse, no tendría nada que ver, reitero, con el justo, necesario y antiguo anhelo piurano de irrigar el valle del Alto Piura con el agua de su río Huancabamba.
El Ing. Briones también objeta que, vía Decreto Supremo, se exonerara la ejecución del Alto Piura de la previa aprobación del Sistema Nacional de Inversión Pública. Su opinión, basada en un hecho indiscutible, es respetable. No obstante, le recuerdo que exactamente el mismo camino se siguió en la mafiosa urdimbre de Olmos durante el gobierno de Alejandro Toledo, razón por la que los piuranos ejercimos la mayor de las presiones para lograr similar trato durante el gobierno actual, por cuanto, el Sistema, bajo de férula del MEF, embarrado hasta el cuello con la estafa olmana, jamás lo hubiera aprobado.
Afirma, igualmente, que se miente al pregonar que la derivación del río Huancabamba a la altura de Tronera permitirá que, vía inversión privada, se construyan las CC HH de Cashapite y Gramadal con 150 MW de Potencia Instalada cada una, por cuanto, aduce, no son viables ni están sustentadas en el Estudio Complementario de Factibilidad (Harza - C y A - Sisa).
Hago notar, al profesional lambayecano, que desarrollos hidráulicos de esta envergadura, además de dirigidos por personas honestas y competentes; deben merituarse con criterio amplio y tendiendo la mirada hacia el futuro. La viabilidad depende del Costo/Beneficio, relación que, en la hora actual, debe ser favorable para muy pocas CC HH. ¿Por qué? Porque el Estado peruano está SUBSIDIANDO la energía eléctrica a través de asignarle un precio muy bajo al gas, situación coyuntural que no será eterna. Un ejemplo para probar lo afirmado: tiempo atrás, un cuzqueño a cargo del Chira Piura, desestimó la construcción de las tres CC HH recientemente operando “colgadas” de estructuras con casi cuarenta años de vida, por cuanto, “en ese momento”, era más barato quemar diesel para generar que construirlas. ¿Quién podría cuantificar el gran daño que, semejante falta de criterio, nos hizo a los piuranos cuando usábamos velas en las décadas transcurridas antes de tenderse las líneas del Sistema Interconectado?
Finalmente y por ahora, confiando en que por su origen haya bebido algunas gotas de las enseñanzas de Haya de la Torre (aprista auténtico e incontaminado, a diferencia de tantos que ahora lucran a la sombra de su memoria), para recordarle su conocida sentencia: “La obra más cara es la que no se construye”. En el caso presente, ¿acaso son necesarios incontables, tediosos y costosos estudios (que son casi inútiles tratándose de túneles) para “demostrar” que es el del más elemental sentido común derivar el agua del río Huancabamba para complementar el riego y explotar a plenitud las formidablemente feraces y desarrolladas tierras del valle del Alto Piura?.
Piura, 23 diciembre del 2009.
(Publicado en Suplemento Semana del domingo 27 de diceimbre)
No es objetivo del presente respaldar al Gobierno Regional de Piura y su inútil Unidad Ejecutora (por no haber sido capaz de preparar el Expediente Técnico ni asumir el Proceso de Selección) por la forma como vienen conduciendo el Proyecto; sino, formular algunas precisiones y aclaraciones al Ing. lambayecano Jorge Enrique Briones Gutiérrez, quien está bombardeando - haciendo constante uso del Internet - el anhelo de los piuranos de bien de desarrollar el Alto Piura sin estafar al fisco ni llenarse los bolsillos con dinero sucio, como, fatalmente, sí sucedió en Olmos y él mismo así lo reconoció y lamentó, llegando, incluso, a señalar a Yehude Simon como el principal responsable, augurándole que algún día, más temprano que tarde, pagaría por ello.
Antes de entrar en materia es necesario recordar cuál es el problema y quiénes lo originaron. La discusión nace porque una banda de sinvergüenzas - para no decir rateros - se coludieron para robarse toda el agua del piurano río Huancabamba para irrigar las Pampas de Olmos (pobladas sólo por zorros y lagartijas), con lo que condenaban a la pobreza eterna a las decenas de miles de seres humanos asentados en el Alto Piura, privándolos de la única fuente disponible de agua para mejorar y regular el riego en su feraz y desarrollado valle.
El citado profesional, de experiencia y altos merecimientos, ha desplegado amplia y variada gama de cuestionamientos al actual Proceso de Selección del contratista para ejecutar el Alto Piura, asistiéndole parcialmente la razón. Así, coincido plenamente con su apreciación que el Expediente Técnico, bajo el que éste se puso en marcha a cargo de Unops, no sirve absolutamente para nada, lo que podría terminar, Dios no lo quiera, en otra monumental estafa al fisco - como Olmos - con bolsillos privados llenos de dinero público. Esta fatal circunstancia, de darse, no tendría nada que ver, reitero, con el justo, necesario y antiguo anhelo piurano de irrigar el valle del Alto Piura con el agua de su río Huancabamba.
El Ing. Briones también objeta que, vía Decreto Supremo, se exonerara la ejecución del Alto Piura de la previa aprobación del Sistema Nacional de Inversión Pública. Su opinión, basada en un hecho indiscutible, es respetable. No obstante, le recuerdo que exactamente el mismo camino se siguió en la mafiosa urdimbre de Olmos durante el gobierno de Alejandro Toledo, razón por la que los piuranos ejercimos la mayor de las presiones para lograr similar trato durante el gobierno actual, por cuanto, el Sistema, bajo de férula del MEF, embarrado hasta el cuello con la estafa olmana, jamás lo hubiera aprobado.
Afirma, igualmente, que se miente al pregonar que la derivación del río Huancabamba a la altura de Tronera permitirá que, vía inversión privada, se construyan las CC HH de Cashapite y Gramadal con 150 MW de Potencia Instalada cada una, por cuanto, aduce, no son viables ni están sustentadas en el Estudio Complementario de Factibilidad (Harza - C y A - Sisa).
Hago notar, al profesional lambayecano, que desarrollos hidráulicos de esta envergadura, además de dirigidos por personas honestas y competentes; deben merituarse con criterio amplio y tendiendo la mirada hacia el futuro. La viabilidad depende del Costo/Beneficio, relación que, en la hora actual, debe ser favorable para muy pocas CC HH. ¿Por qué? Porque el Estado peruano está SUBSIDIANDO la energía eléctrica a través de asignarle un precio muy bajo al gas, situación coyuntural que no será eterna. Un ejemplo para probar lo afirmado: tiempo atrás, un cuzqueño a cargo del Chira Piura, desestimó la construcción de las tres CC HH recientemente operando “colgadas” de estructuras con casi cuarenta años de vida, por cuanto, “en ese momento”, era más barato quemar diesel para generar que construirlas. ¿Quién podría cuantificar el gran daño que, semejante falta de criterio, nos hizo a los piuranos cuando usábamos velas en las décadas transcurridas antes de tenderse las líneas del Sistema Interconectado?
Finalmente y por ahora, confiando en que por su origen haya bebido algunas gotas de las enseñanzas de Haya de la Torre (aprista auténtico e incontaminado, a diferencia de tantos que ahora lucran a la sombra de su memoria), para recordarle su conocida sentencia: “La obra más cara es la que no se construye”. En el caso presente, ¿acaso son necesarios incontables, tediosos y costosos estudios (que son casi inútiles tratándose de túneles) para “demostrar” que es el del más elemental sentido común derivar el agua del río Huancabamba para complementar el riego y explotar a plenitud las formidablemente feraces y desarrolladas tierras del valle del Alto Piura?.
Piura, 23 diciembre del 2009.
(Publicado en Suplemento Semana del domingo 27 de diceimbre)
