VACUNA PARA DESAHUEVARNOS (FINAL)

 

(Piura, 06 septiembre 2023)

 

Luis Gulman Checa

 

Los piuranos, desde décadas atrás, fuimos grandemente favorecidos por el gobierno central y/o el Estado a través de dos formidables obras de infraestructura de riego: La Colonización San Lorenzo y el Sistema Chira Piura. Con semejantes HERRAMIENTAS DE DESARROLLO en nuestras manos debiéramos ser potencia mundial agro exportadora, al extremo, por ejemplo, que las chilenas (superando a las peruanas) deberían ser inferiores a las nuestras.

 

Preguntémonos que maldición se abatió sobre nosotros que, en vez de estar en la gloria gozando de las formidables riquezas provenientes de la explotación de semejantes recursos, damos lástima y andamos cual mendigos como lo demuestra la portada de la edición de “Correo” de la fecha:

 

CRISIS EN EL SECTOR AGRÍCOLA

 

El presidente de la Cámara de Comercio de Piura estima la caída del 90% de la producción de mango y el 40% del banano.

 

La Cámara de Comercio pide a la presidenta de la República y a los ministerios de Economía y Agricultura mayor atención al sector agrícola.

 

Dejando de lado la bárbara pachotada del citado presidente, equivalente a que un recolector de chatarra opinara sobre la marcha de la economía del país, sí es vergonzoso y denigrante que los agricultores piuranos, tras haber recibido tremendo regalo, por cuanto hasta la costosísima agua regulada la usufructúan gratuita y malditamente, tengan la desvergüenza de portarse como limosneros, demostración de lo cual está en el permanente pedido de regalo de dinero del erario ante cualquier condición climática o de otro orden que incida sobre la actividad agropecuaria. Sin embargo, respecto al flamante lloriqueo, sería de agradecer al presidente de la Camco precise qué acciones concretas espera de las autoridades invocadas. ¿Serán tan omnipotentes de manejar el clima?

 

El colmo de la concha, cinismo y/o desvergüenza inmersos en tales lloriqueos está en que cuando las cosas van bien y, literalmente, SE LLENAN LOS BOLSILLOS DE PLATA, se la embolsican y/o malgastan sin destinar ni un mísero centavo para optimizar la operación y el mantenimiento de las estructuras que les fueron regaladas. ¿Una prueba de ello? Según dicen ellos mismos, los canales y estructuras de la Colonización San Lorenzo están semi destruías o al borde del colapso, ergo, están exigiendo que el Estado (mototaxistas, vendedores ambulantes, profesores, etc.) vuelva a construirlas para que ellos sigan tirando y desperdiciando el valiosísimo bien que es el agua regulada (en Israel el m3 vale m/m $ 0.60), entre otras bestialidades, plantando arroz.

 

Preguntémonos: Acaso San Lorenzo, Las Lomas y Tambogrande no serían paraísos en la tierra si los colonos, por ejemplo, hubieran sido japoneses.

 

 

 

¿San Lorenzo será la única “perla” de nuestra manifiesta incapacidad e ignorancia? Claro que no, pues el valle del Bajo Piura, formidable productor por décadas del calificado como MEJOR ALGODÓN DEL MUNDO, bendecido en la década del 80 del siglo pasado con grandes obras tanto de infraestructura hidráulica (adiós plantas de bombeo) como con completos Sistemas de Drenaje; incalificablemente devino en un valle no solo dedicado al cultivo del arroz, sino, salvajemente, plantando dos cultivos al año.  Así, criminalmente, quienes debieron enriquecerse gracias a semejante regalo (*), destrozaron el valle destruyendo y arruinando los sistemas de drenaje.

 

Reflexión final:

 

Muchas veces me he preguntado que sucedió con los piuranos desposeídos de tierras y haciendas por la Reforma Agraria, cuando, transcurrido poco tiempo tras el colapso de las Cooperativas, fueron canibalizadas y cada beneficiario recibió su parcela. ¿Por qué no recompraron a precio huevo sus parcelas a cada mini propietario para recrear las antiguas haciendas?

 

Ello no es ninguna especulación ni cuento chino, pues, en el Alto Piura apareció un inversionista limeño que RECREÓ la hacienda Sol Sol, m/m en los 80 del siglo pasado, la cual sigue siendo un envidiable y moderno ejemplo de producción agrícola.

 

(*) El Bajo Piura, antaño sacando santos y procesiones rogando bajara el río Piura, y, cuando ello sucedía, debían bombear el agua para regar; luego de las citadas obras dispuso de agua segura y permanente y canales que permitían regar por gravedad. Sin embargo, siendo claro hasta para un ciego que el agricultor debía pagar por el uso de tal agua, la recibió gratis. ¿Qué calificativo merecen los responsables de tal crimen, agravado por cuando el Sistema de Drenaje requería PERMANENTE Y COSTOSO MANTENIMIENTO?

 

¿Perdonará el Señor nuestro salvajismo?