¿EMERGENCIA POR SEQUÍA?

(24 febrero del 2015)

Luis Gulman Checa

Emergencia, según el DRAE, es sinónimo de accidente, es decir, súbita presencia de un hecho fortuito y/o inesperado. Entonces, tratándose del clima de Piura que siempre  fue impredecible: morimos de sed, las lluvias son diluviales como en la época de Noé o el clima es benigno sin extremos y todos contentos; es inapropiado “Declarar estado de emergencia” por el simple y natural hecho de la presencia de un período seco.

Las ansias de algunas autoridades por declarar estos estados en sus jurisdicciones debemos “tomarlas con pinzas”. ¿Por qué? Por cuanto ello les permite meter mano a las arcas públicas para atender con  celeridad  los requerimientos de los afectados, es decir, hacer “cera y pabilo” de los dineros puestos a su cuidado con el pretexto, por ejemplo, que el ganado está muriendo por falta de alimento.

¿Ejemplo típico y clavado de emergencia? Un terremoto grado 9.0. ¿Otro? Un devastador incendio en el Mercado Modelo de Piura que arrase con todo. En tales casos todos estaríamos de acuerdo que enfrentamos una real emergencia, pero, el que caprinos, ovinos y/o vacunos adelgacen por  carencia de pastos por falta de lluvias, no configura emergencia de ninguna clase al ser natural que si un ser no se alimenta pierde peso pudiendo llegar a morir por inanición.

Se supone que todos quienes  desarrollan actividades de la índole que sea conocen el medio en el que se desenvuelven y deben tomar  precauciones  para afrontar  situaciones que, necesariamente, se presentarán, como, por ejemplo,  la sequía en el caso de los criadores de ganado.

Veamos el caso del Alto Piura, valle con tierras ubérrimas y con Agua Regulada propia guardada en el sub suelo, del que llegan noticias de autoridades clamando por la declaración de las “benditas emergencias”. Pregunto: ¿Acaso en tales zonas ha desaparecido, por arte de magia, el agua del sub suelo? Los pozos de diversa clase que daban vida al valle, entre 500 y 1,000, A.V. (antes de Velasco), ¿fueron taponados? De repente las tierras, por alguna extraña maldición, perdieron su fertilidad y ni siquiera crece el pasto en ellas. Porque, si así no fuera, hago recordar que 01 hectárea de Chala (maíz a gran densidad) produce m/m 140 Ton. de magnífico  pasto verde, equivalente a 4,600 raciones para  vacunos adultos. Si se lleva a caprinos, multiplíquese por 5 o 6.

Dejen de llorar y actúen como corresponde: TRABAJEN.