¿HASTA CUÁNDO?

 

(Piura, 12 marzo 2022)

 

Luis Gulman Checa

 

Va a continuar la PNP con los brazos cruzados ante los casi cotidianos asaltos y robos perpetrados contra personas que retiraron dinero de un Banco.

 

La primera reflexión que me viene a la mente ante tales informaciones es cómo puede haber  individuos tan necios y/o desapercibidos que, ante  plaga tan incontrolable, continúan retirando fuertes sumas y salen campantes y contentos a la calle. El día de hoy el robo lo informó “Correo”:

 

“Marcas” roban más de S/. 100 mil a empresario.

 

Este asalto, por sus características, revela que estamos frente a una red perfectamente organizada aprovechando los avances tecnológicos, especialmente en comunicaciones, pues, habiendo la víctima retirado el dinero en un Banco de la ciudad de Piura fue asaltado y robado en la puerta de su casa ubicada en el puerto de Paita.

 

Como es usual, los delincuentes fueron dos trasladándose en una motocicleta, por lo que, cumpliendo dispositivos vigentes tendentes a preservar la vida de quienes se movilizan en tales vehículos, tenían los rostros perfectamente cubiertos por los obligatorios cascos. Es obvio que al despojado lo pescaron totalmente desprevenido, pues, habiendo hecho el retiro en Piura horas atrás, jamás de los jamases podía imaginar ser asaltado en Paita.

 

Como los delincuentes paiteños no son clones de Mandrake, está claro que fueron informados por sus cómplices piuranos.  Así, imagino, la PNP, dentro del obligado proceso investigatorio, empezará poniendo bajo la lupa al responsable de la ventanilla del Banco donde se retiró el dinero, por cuanto no creo posible que el cliente hiciera ostentación del monto retirado de modo que todos los presentes sabían que salió “forrado” del Banco.

 

Otra posibilidad sería que en el interior del Banco hubiera estado a la expectativa un “marca” identificando a personas pasibles de ser asaltadas. Sin embargo, si tal hubiera sido el caso, tendríamos que preguntarnos cómo sabía no solo quién era la futura víctima  sino cuál era su domicilio, lo que nos llevaría a pensar que esta red mafiosa tiene identificados a empresarios que mueven fuertes sumas conociendo tanto sus desplazamientos  habituales como domicilios.

 

Si así fuera, la pregunta obvia sería la siguiente: Acaso, para ello, ¿no requerirían obligadamente la cooperación de alguien de dentro del Banco?

 

Sin embargo, como el mundo es de los que saben y, en este caso, los sabios pertenecen a la PNP, confiemos que más pronto que tarde pongan manos a la obra y desbaraten estas redes mafiosas, por cuanto, es inimaginable que tan señera institución estuviera comprometida.