ALCALDE: ZAPATERO A TUS ZAPATOS
(Piura, 03 marzo 2023)
Luis Gulman Checa
Me refiero, obviamente, al alcalde provincial
de Piura, quien, no lo olvidemos, es un tambograndino inundado por un deseo
incontenible de darse íntegro en pro de la ciudadanía, demostración de lo cual
está en que desempeñándose como alcalde
distrital de su tierra, dejó su cargo para postular a la alcaldía de la MPP, y, al no ser elegido,
repitió el plato en el último proceso logrando la ansiada meta para seguirse
prodigando, mañana, tarde y noche, buscando convertir nuestra tierra en un real
y feliz paraíso.
Así, está demostrado, por los sucesos
descritos, el real e incontenible afán del alcalde por servir al prójimo. Sin
embargo, recordando el aserto que dice EL CAMINO AL INFIERNO ESTÁ LLENO DE
BUENAS INTENCIONES, salta a la vista que anda más perdido que cuy en tómbola al
haber demostrado desconocer, absolutamente, cuáles son los primeros e
insalvables deberes inherentes a su
cargo, como lo demuestra la información aparecida en portada de “Correo” días
atrás:
El alcalde de Piura,
Gabriel Madrid, pidió acelerar el Plan Integral del río y el Plan Maestro de
drenaje pluvial de Piura, Castilla y Veintiséis de Octubre.
Le aconsejo al alcalde, delicada y
respetuosamente, abordar un vehículo municipal (ojalá escoja uno con todas sus
luces funcionando perfectamente) y recorrer, de cabo a rabo, de día y de noche,
la ciudad capital departamental, cuya administración el ansió y recayó en sus
manos, para constatar, con sus propios ojos, que la misma, en vez de
paradisiaca, es un verdadero INFIERNO por cuanto un gran porcentaje de personas
se zurran en cuanta norma existe.
Cambiando de cristal y pensando mal si queremos
pensar bien, resulta obvio ser millones de veces MÁS RENTABLE, para las
autoridades concernidas, la ejecución de grandes y costosas obras públicas que
la abnegada, silenciosa y no redituable tarea de imponer en la ciudad el
irrestricto respeto a las normas convirtiéndola en un remanso de paz y
tranquilidad.
Digresión:
Recordemos la estúpida e irracional decisión de
haberle encargado a la administración municipal anterior, la ejecución de un
tramo de defensas contra inundaciones en el Bajo Piura. De seguir aplicando tan
dudoso criterio, ¿por qué no poner en manos del Proyecto Especial Chira Piura
el servicio de Baja Policía?
Conclusión reiterativa:
La elección de
autoridades nos sigue llevando al infierno
