L L O R O N E S

 

(Piura, 25 julio 2022)

 

Luis Gulman Checa

 

El problema no está en la proliferación de lloriqueantes rogándole limosnas al  Estado ante cualquier dificultad (tal y como si fuera bombero), sino en la acogida que hechos tan vergonzosos reciben de los medios de comunicación como simples cajas de resonancia, sin emitir opinión.

 

Me motiva información aparecida en la edición de “El Tiempo” de la víspera:

 

Ganado de La Matanza solo sobrevivirá 30 días más si no llega la ayuda.

 

Productores esperan que PCM apruebe declaratoria de emergencia para recibir alimentos que salven a sus animales.

 

Preguntémonos cuál ha sido el aporte al Estado de parte de los llorones de hogaño en los años que sus rebaños fueron bendecidos por  pródigas  lluvias que pintaron de verde los prados interminables permitiendo que sus ganados lucieran tan robustos que parecían hipopótamos.

 

Así mismo, ¿alguna vez, cuando los campos rebosaban de hierba, se preocuparon por segarla, enfardarla y guardarla para ser utilizada en años como el presente?

 

Echemos una mirada al pasado para constatar, una vez más, que el paso del “Atila” Juan Velasco Alvarado por el gobierno fue una desgracia que, luego de más de medio siglo, continúa sangrando al país. ¿Por qué? Por cuanto los ganaderos del Alto Piura no están enfrentando ninguna situación anómala o extraordinaria  al ser la sequía  una condición absolutamente normal.

 

Sugiero a la dirección del diario revisar  archivos de sus ediciones de fechas anteriores a la aparición del citado DESTRUCTOR buscando lloriqueos similares, por ejemplo, de los responsables de la hacienda Pabur debido a años más secos que el actual, habida cuenta que no manejaban “unas cuantas cabezas” sino hasta más de VEINTE MIL.

 

¿Cuál será la medicina a aplicarle al Perú para liberarlo de la maldita y pestífera infección adquirida por el fatal paso por el gobierno del citado DESTRUCTOR?

 

Un simple y primer diagnóstico es que, respecto a la recuperación de la actividad agropecuaria, el enemigo a combatir es el MINIFUNDIO.