NO TENEMOS REMEDIO

 

(Piura, 12 julio 2022)

 

Luis Gulman Checa

 

Me refiero, como es obvio, a los piuranos, siendo demostración indiscutible de  ello la llamada aparecida en la portada de “El Tiempo” del pasado domingo:

 

Peihap recupera reserva hídrica y vuelve a ser proyecto viable

 

ANA otorgó reserva de 274.8 MMC y no 335 MMC como antes.

 

Antes de entrar en materia, debo decir que, mientras nuestros medios de comunicación actúen tal y como si estuvieran en manos de envidiosos y traidores chilenos en vez de a cargo de piuranos auténticos y bien nacidos; Piura seguirá rumbo al desastre.

 

Aceptando que mi prédica referida al Alto Piura equivale a UNA VOZ EN EL DESIERTO, por cuanto, la citada llamada es prueba categórica que quienes manejan tal diario jamás han leído ni uno solo de mis tantos artículos referidos al tasajeado, maltratado y pulverizado Proyecto Alto Piura, reitero, una vez más, que el tal Peihap, desde su primer día, fue una fuente para robar al erario y estafar a todos los piuranos, lo cual, bien mirado, lo han tenido merecido por estultos e indiferentes.

 

Lo afirmado  líneas arriba se funda en que el desarrollo del Alto Piura debió ser la IV Etapa del PECHP, como lo demuestra que el estudio para “Regular y Mejorar el Riego en el Valle del Alto Piura”, lo llevó a cabo tal entidad por insistencia y financiamiento del Banco Mundial. Sin embargo, César Trelles Lara y su banda, no solo crearon el PEIHAP para esquilmar el erario y llenar pútridos bolsillos (entre otros, todos quienes integraron e integran el Consejo Directivo de tal esperpento), sino, peor aún, su ignorancia y la de sus sucesores quedó demostrada tras la suscripción y resolución de dos contratos de obra lo que implicó tirar varios cientos de millones de soles al desagüe, y, cómo no, a corruptos y pestíferos bolsillos.

 

La verdad, monda y lironda, es que el Proyecto Alto Piura está MUERTO EN VIDA. ¿Por qué? Por cuanto, habiéndose llevado los lambayecanos el agua del río Huancabamba a las pampas de Olmos (ahora con envidiables emprendimientos agrícolas), sería irracional y anti patriótico insistir en el actual esquema del Peihap por cuanto la descarga del río Huancabamba no alcanza para abastecer ambos desarrollos.

 

Finalmente, confiando que de una vez por todas entiendan los responsables del. Diario la aberración implícita en la comentada llamada, reiteraré cual es el volumen de agua que debe derivarse desde Tronera, Huancabamba, para cumplir lo dictaminado en el citado Estudio.

 

 

Para cumplir con los requisitos de riego y expansión de la frontera agrícola en el valle del Alto Piura deben derivarse 370 MMC.

 

Recordemos que el citado Estudio abrió la posibilidad de generar energía hidroeléctrica aprovechando la caída de 3,000 metros, razón por la que se llevó a cabo el “Estudio Complementario de Factibilidad del Alto Piura”,  con la finalidad de determinar las  bases para producir tal energía. Así,  debían instalarse dos CC HH de 150 MW de potencia cada una, precisando que bastaban 335 MMC para que fueran rentables.

 

Está claro que hasta un pollino entiende que ello no afectó en nada la necesidad de derivar 370 MMC para atender el riego, sin embargo, los piuranos, ratificando la validez de la caricatura que los representa orondos y panzones descansando bajo un frondoso algarrobo, no movieron un dedo cuando, los listos y despiertos lambayecanos lograron bajar la reserva de agua del río Huancabamba para el valle del Alto Piura, de 370 a 335 MMC.

 

¿La cereza sobre la torta? La acaba de poner “El Tiempo”, declarando estúpidamente que el Peihap recobró viabilidad con míseros 274.8 MMC.