BENDITO SEA EL VAR

 

(Piura, 08 junio 2021)

 

Luis Gulman Checa

 

Para los no entendidos, me refiero al nuevo sistema de apoyo a los árbitros de fútbol de parte de quienes escrutan cada jugada mil veces mejor que  aquél gracias a observar el juego en computadoras. Así, desde  que se implantó, hemos sido testigos de innumerables rectificaciones de los “hombres de negro” que antaño eran más firmes e incontestables que las bulas papales.

 

Gracias al VAR, nuestra selección de fútbol acaba de lograr un gran triunfo en Quito ante Ecuador por 1 a 2. ¿Por qué? Por cuanto el árbitro uruguayo, a inicios del segundo tiempo, enlodando la gran tradición futbolística de su país, perpetró un error garrafal cobrando un penal a favor de Ecuador debido a una supuesta mano de Abram en el área chica cuando el balón, si bien tocó su brazo, éste estaba pegado al cuerpo de modo que no hubo falta alguna, la que se concreta cuando la mano va a la bola.

 

Si los hombres del VAR no le hubieran jalado las orejas al árbitro, lo más probable hubiera sido que ahora estuviéramos lamentando otra derrota  porque, convertido el penal,  hubiera puesto el score 1 a 0, cuando lo más justo, según el desarrollo del primer tiempo, era que Perú debía estar arriba por 1 o 2 goles.

 

Digresión:

 

Tengo la sensación que Ricardo  Gareca leyó mi escrito sobre el partido que Perú perdió en Lima ante Colombia por 0 a 3, por cuanto, mientras Guerrero calentó banca, su reemplazante, Gianluca Lapadula, se convirtió en el héroe de la jornada al asistir magníficamente primero a Cueva y luego a Advíncula para que anotaran los goles peruanos. Ello no fue todo, pues, en el primer tiempo hizo otra asistencia a Cueva quien se comió el gol en forma similar al penal que erró en el mundial de Rusia ante Francia. (¿Cuál habría sido el resultado si lo convertía? Nunca se sabrá.)

 

Curiosamente, mostrando la otra cara de la medalla, quien puso al borde del abismo al equipo peruano fue su propio  técnico, Ricardo Gareca, al perpetrar el increíble error de DESARMARLO cuando el partido estaba por terminar y ganábamos por 2 a 0. ¿Qué hizo? Dos cambios inexplicables e innecesarios desacomodando el funcionamiento de los peruanos propiciando que Ecuador lograra un gol. Así, un partido que debió culminar con un calmado predominio peruano, y quizá, con el logro de un tercer gol por parte de Lapadula; devino en un final de terror que tuvo al país entero en ascuas, tan igual como viene sucediendo con el devenir del reciente proceso electoral en el que el pecado no lo cometió una persona sino incontables que han optado por el suicidio colectivo. Confiemos que, es este caso, también triunfe el Perú.

 

 

 

Ojalá, en el futuro, Gareca tenga siempre presente que un partido de fútbol no termina mientras no acaba, confirmación de lo cual se repitió poco después de culminado el partido contra Ecuador en el enfrentamiento Colombia vs Argentina.

 

A los 08 minutos del primer tiempo los visitantes iban ganando por 0 a 2, es decir, de acuerdo a la tesis de Gareca, el técnico argentino hubiera podido cambiar medio equipo para dar descanso a los titulares e ir probando nuevos elementos. Sin embargo, a pesar que ello no sucedió y ratificando lo expresado líneas arriba, el equipo colombiano logró empatar 2 a 2 a los 94 minutos.