ABSURDA DISPOSICIÓN
(Piura, 24 octubre 2021)
Luis Gulman Checa
Revela absoluta carencia de sentido común
seguir manteniendo cerrados los cementerios, supuestamente, para evitar
aglomeraciones a fin de prevenir los contagios del Covid, cuando,
paralelamente, no solo las personas se ubican una al lado de la otra tanto en
buses de toda laya como en aviones, sino, además, están abiertos al público
cinemas, mercados, centros comerciales, clubes, Bancos, etc., etc.; además de
las interminables colas formadas por toda la ciudad donde los penitentes están
mucho más cerca uno de otro de lo que estarían en los cementerios.
Para peor, la noticia aparecida en la portada
de “Correo” de la fecha es mentirosa al aseverar que la Diresa RESTRINGIRÁ el acceso
a los cementerios los próximos días 1 y 2 de noviembre, cuando lo cierto es que
los mismos están cerrados a cal y canto desde que se desató la pandemia.
El cierre inicial fue lógico y natural habida
cuenta el aislamiento generalizado que se decretó, no obstante, con el
transcurrir del tiempo las normas se fueron flexibilizando al extremo que
actualmente, salvo la mascarilla, la vida se ha normalizad al extremo que se autorizaron
reuniones sociales.
Digresión:
Me pregunto si acaso los responsables de la
Diresa son foráneos por lo que no tienen deudos en nuestros cementerios o,
quizá, todos los olvidan tan luego los
sepultan.
Para aquilatar debidamente la irracionalidad de
tal disposición, copio parte del comunicado emitido por tal entidad (¿se habrá contagiado al toque de las masmias
emitidas por Palacio de Gobierno?):
“Informamos
al público en general que se encuentran restringidas las visitas y velatorios
en los cementerios públicos y privados con la única finalidad de evitar aglomeraciones
y minimizar los riesgos en lugares con alto potencial de contagio como son los
cementerios, dado el actual contexto de emergencia
sanitaria debida al COVID-19”
¿Por qué los cementerios serían más
riesgosos/peligrosos que, por ejemplo, aviones, buses o centros comerciales, como
diseminadores del Covid?
Termino expresando mi extrañeza por la bárbara
omisión de la Diresa al no haber prohibido los partidos de fútbol, por cuanto,
como hasta un pollino puede apreciarlo, en el curso de los mismos las personas
no solo no guardan el “distanciamiento social” sino que, cuando festejan un
gol, se besan y abrazan.