I  R  R  E  S  P  O  N  S  A  B  I  L  I  D  A  D

 

(Piura, 15 diciembre 2020)

 

Luis Gulman Checa

 

La nuestra, me refiero a los piuranos, quienes pocos días atrás llorábamos cual viudas desconsoladas ante el grave y oscuro panorama a la vista por haber perpetrado la barbaridad/estupidez/irracionalidad de permitir plantar una segunda campaña de arroz no solo estando inmersos en un año evidentemente seco, sino, peor aún, disponiendo de serios y respetables pronósticos que el 2021 “La Niña” marcará nuestro destino, es decir, será seco, y, ahora, tras haber recibido unas cuantas gotas de aguas de trasvase,  olvidamos nuestra realidad en vez de enfrentarla.

 

Naturalmente que la esperanza jamás debe perderse, especialmente tratándose de una población profundamente creyente y religiosa demostrada por la pléyade de Cristos, Vírgenes y Santos adorados por nosotros. Sin embargo, ¿cómo podemos seguir rogándoles nos auxilien  habiendo olvidado la justa y profunda frase bíblica que dice AYÚDATE QUE YO TE AYUDARÉ?

 

¿Qué grado de cinismo y sinvergüencería debe albergar una persona quien, habiendo recibido inconmensurables bienes y dones, tras desperdiciarlos y malgastarlos, osa pedir más de lo mismo?

 

Por si la idea no estuviera clara, el objetivo del presente es reiterar el CRIMEN que venimos perpetrando, desde décadas atrás, representado por el desperdicio y mal uso de un bien inconmensurable como es la BENDITA AGUA REGULADA que el Estado nos regaló a los piuranos, quienes, disponiendo de grandes áreas  para realizar agricultura tecnificada, de gran nivel y productividad, colocando nuestra tierra como referente mundial Agro Exportador; la desperdiciamos plantando arroz  y regando arenales por inundación. ¡QUÉ BESTIAS!

 

Respetuosamente me dirijo a nuestros líderes y adalides (supongo son quienes aparecen en los medios casi cotidianamente) rogándoles, poniendo los pies en la tierra y/o tomando el toro por los cuernos, dejar de lado el Covid,  las discusiones referidas a la futura marcha de la economía,  dilucidar cuántas personas perdieron el trabajo debido a la pandemia y otros asuntos similares e inconducentes, poniendo sobre el tapete la discusión, análisis o como quiera llamársele, tanto al actual incalificable desperdicio del AGUA REGULADA como  las normas y condiciones que deben regir su uso en el futuro inmediato.

 

Termino con una reflexión:

 

Así como el Perú está lanzando al mundo el mensaje que se encuentra al borde del abismo debido a la corrupción y desvergüenza de sus gobernantes, los piuranos continuamos sumidos, agrícolamente, en la Edad de Piedra.