EL COLAPSO DE LA OBRA PÚBLICA
(Piura, 03 febrero 2021)
Luis Gulman Checa
La edición de “Correo” de la víspera trajo una
información espeluznante referida a una modesta obra de agua y alcantarillado
en el distrito de La Unión, la cual, según se precisa, LLEVA EJECUTÁNDOSE MÁS
DE 11 AÑOS, deduciéndose que tras la última de las innumerables Ampliaciones de
Plazo, debió concluirse el pasado 31 de enero, lo que no sucedió continuando paralizada.
De primera intención se pensaría que ello solo
es una raya más al tigre de la conocida incapacidad de las
municipalidades para ejecutar obras,
pero, lo atroz y terrible es que la entidad encargada no es la municipalidad distrital sino nada menos
que el mismísimo Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento, es decir,
el supuesto non plus ultra en la
materia.
A Dios gracias tal no es la imagen que reflejan
todos los ministerios como lo prueba la larga lista de magníficos puentes
construidos por el de Transportes y Comunicaciones en la vía Sullana - Talara,
como también, el que ahora está dando lástima en La Unión, cuando se encargó
del mismo trabajo en la ciudad de Piura estando al frente de la MPP doña Ruby.
Dejando de lado los desastres implícitos en
¿formidables obras? de alcance nacional, como, por ejemplo, el tremendo robo a
la vista en la injustificable Modernización de la Refinería de Talara y
volviendo la mirada a nuestro terruño, hallamos demasiadas obras - que antaño
se hubieran ejecutado sin problema alguno - mostrando las mismas lacras que la
comentada en La Unión:
·
El
colegio Fátima.
·
El
Colegio Salaverry.
·
El
¿palacio? Albergando el Ministerio Público.
·
El
estadio de Sullana (Campeones del 36).
·
La
reparación del canal de Derivación del PECHP.
·
El
sistema de alcantarillado del balneario La Esmeralda.
·
Siguen
m/m 230 obras de todo calibre.
¿Cómo es posible que
sucedan hechos tan lamentables si, formalmente, las normas y procedimientos que
regulan la Obra Pública son perfectos y a prueba de balas?
Porque, fatal y mortalmente, el Estado, desde
20 o 30 años atrás, empezó a ser infectado por autoridades y funcionarios
mediocres, en toda la amplitud del término, a lo que ayudó en gran medida la
Regionalización/Descentralización dando poder a muchísimos quienes carecían de
cualidades/preparación para ejercerlo. De ahí, como es público y notorio,
apareció imparable la otra lacra que nos vine fagocitando sin tregua: LA CORRUPCIÓN.