AYUDANDO A SALVAR VIDAS
(Piura, 01 febrero 2021)
Luis Gulman Checa
Como informaron los medios, el pasado sábado perdió la vida una muy joven
madre de familia junto a su pequeñita hija a consecuencia de un lamentable
accidente de tránsito en la carretera Piura - Paita a media mañana, es decir, para hacernos
reflexionar cómo fue posible que en plena recta de una autopista, de día y con
sol, un vehículo terminara dando varias vueltas de campana con tan aciagos
resultados.
Como la información precisó que la causa del
accidente fue el colapso de una llanta delantera, sin ser mago pero gracias a
mi larga experiencia como conductor; me atrevo a señalar la razón del mismo:
El conductor, al sentir el colapso de la llanta, perpetró
el peor error que puede cometerse: PISÓ
EL PEDAL DEL FRENO.
¿Qué debe hacer el
conductor cuando siente que una llanta perdió aire o, peor aún, explotó?
Soltar el pie del acelerador, asir fuertemente
el timón para mantener el vehículo en el mismo rumbo, enganchar sucesiva y
rápidamente para disminuir la velocidad
(lo mismo si fuera caja automática) hasta que el vehículo se detenga. Lo
he vivido muchas veces y, a Dios gracias hasta el momento, jamás tuve problemas
a excepción del obvio inconveniente de montar la llanta de repuesto.
Relataré una experiencia que me sirve para
SABER lo catastrófico que resulta pisar el freno cuando una llanta se baja:
Muchos años atrás circulábamos por la carretera Piura al
Km. 50 en una camioneta Datsun (de las pequeñas de antaño) transportando
porongos vacíos de leche. El suscrito iba de copiloto y el conductor era un
sustituto del habitual y, obviamente, novato y mal adiestrado. De repente sentí
que la llanta posterior derecha estaba baja y dije: “llanta baja”. El conductor de inmediato puso el pie en el freno pero lo
vi y grité: NO FRENES. Sin embargo, el pequeño toque que le había dado originó
que la camioneta, cual maromero de circo, volara por el aire yendo a caer al
otro lado de la pista con la trompa dirigida hacia Piura y los porongos
desperdigados. Es decir, giró 180° y, a Dios gracias, no nos volcamos.
Ello me permite SABER que todos los accidentes
como el descrito que terminan con los vehículos destrozados tras sucesivas
vueltas de campana, son responsabilidad directa del conductor por EL VIRTUAL
CRIMEN DE PISAR EL FRENO CUANDO SIENTE UNA LLANTA BAJA.
¡Difúndanlo y repítanselo a los suyos y conocidos para
coadyuvar a salvarles la vida!