EL IMPERIO DE LA IRRACIONALIDAD
(Piura, 09 febrero 2021)
Luis Gulman Checa
Muy temprano hacía un recorrido por las
televisoras nacionales como hago cada día y, además de las consabidas clases
gratuitas para delincuentes difundiendo, con lujo de detalles, las últimas
modalidades de asaltos y robos; me topé con un informe sobre las penurias que
afrontan los moradores de los antaño llamados “Pueblos jóvenes”, entre otras,
carencia total de agua y aguda escasez de alimentos. Además de ello resaltaba
lo inadecuado de la topografía del terreno sobre los que se realizaron las
INVASIONES originarias.
Me vino a la mente la irracionalidad implícita
en la existencia de tales asentamientos humanos en un país cuya densidad
poblacional es de 24.5 personas por Km2 y con extensiones interminables de
terrenos planos mil veces más asequibles para proyectar y desarrollar
núcleos con todos los servicios.
Seguí rememorando yéndome 63 años atrás, 1957,
cuando me instalé en Lima para cursar cuarto año de media permaneciendo hasta
1963, cuando me gradué de Agrónomo en la Universidad Agraria, la única
existente en el país cuando, en 1959, inicié mis estudios universitarios:
La capital no llegaba a
un millón de habitantes y, también, yendo a La Molina por Javier Prado la
ciudad terminaba pasando el tranvía (actual zanjón), a excepción del colegio
San Agustín y el aeropuerto.
¿Cuál habrá sido la
razón por la cual Lima, cual maldita hechicera, atrajo a tantas personas de
todos los confines de la patria hasta llegar a convertirse en una invivible, insegura y caótica ciudad?
Si no estoy errado alberga m/m la tercera parte
de la población del país a consecuencia de las masivas migraciones acaecidas
las últimas décadas, como se deduce de lo precisado líneas arriba. Así, deviene
en urgente analizar las razones de tan irracional concentración humana,
especialmente porque todo indica que el citado efecto imán sigue vivito y
coleando por lo que el perverso chorro de
gentes hacia la capital continúa incrementándose.
Esta situación es una raya más al tigre de la
larga lista de irracionalidades vigentes en el país equivaliendo a otro récord
- semejante al reciente del cambio de presidentes como si fueran camisas - al
ser el único con una mega ciudad albergando un tercio de la población del país,
situación que lejos de atenuarse cada día es más notoria porque la migración,
inicialmente originada por personas sin arraigo y desamparadas, está tragándose
a jóvenes profesionales ávidos de alcanzar el cielo allá donde se
cuecen las habas.