MUCHO RUIDO Y POCAS NUECES
(Piura, 13 noviembre 2017)
Luis Gulman Checa
¿Recuerdan, estimados lectores, el escándalo
mediático desatado poco tiempo atrás al airearse las mafias corruptas
enquistadas en la Dirección Regional de Transportes aprovechándose de la
expedición de brevetes para robar?
No recuerdo el número exacto de funcionarios encarcelados,
tampoco sé si alguno continúa entre rejas ni, menos aún, si el Ministerio
Público aún está abocado al caso o, debido a su desorbitada carga procesal, lo
ha tirado para que duerma el sueño de los justos.
Lo que sí está claro es que la CORRUPCIÓN no
solo ha infectado TODO EL ESPECTRO PÚBLICO sino que, a pesar de la desatada lucha
contra ella a raíz de las
revelaciones del caso Lava Jato, la
misma, fatal y desgraciadamente, no solo continúa gozando de buena salud sino
progresando y diversificándose cada día más.
Al grano. Los brevetes tienen una fecha de
caducidad por lo que es necesario revalidarlos, debiendo para ello, entre otros
requisitos, someterse a un examen médico el cual, como ya se
imaginará, estimado lector, obligadamente tiene llevarse a cabo en lugares
autorizados, los cuales, imitando a las pulgas que alocan a los canes,
se ubican a inmediaciones de la oficina de la Dirección de Transportes.
Digresión:
Años atrás, cuando revalidé por última vez mi
brevete, la señorita encargada me dijo/preguntó: ¿Tipo de sangre? Respondí 0+,
por cuanto, desde primaria, lo sabía. La niña, reconozco con cara de vergüenza ajena
me dijo: “Disculpe señor, pero tiene usted que ir a tal dirección (un
cuchitril en la esquina de los jirones Lima y Cajamarca), único autorizado para
realizar el examen luego de cancelar S/. 20.00 (debe costar S/.0.50). Si no me
equivoco, tal disposición se promulgó siendo ministro de Transportes Enrique
Cornejo, el antaño alumno/protegido de AGP y encargado de repartir los dólares
MUC. ¿Quiénes se habrán forrado los bolsillos con tan descarado robo? Y el
Ministerio Público y/o la Defensoría del Pueblo, ¿por qué diablos no cumplen
con su tarea desenmascarando a estos desembozados ladrones?
Para estos “centros médicos” monopólicos, la inflación desatada en
el Perú es mil veces mayor que la venezolana, pues, en el transcurso de m/m 10
días, el costo de tal examen que era de S/. 80.00 (embolsicándose así un
huevo de plata) se elevó, primero a S/. 100.00 y, días después a S/.
150.00.
Dos días atrás me apersoné a la oficina de
Transportes solicitando entrevista al Director, su secretaria me preguntó de
qué se trataba, se lo dije y me remitió al abogado fulano de tal (la memoria
me está fallando) quien estaba en reunión. Me atendió una
jovencita educada que dijo ser su adjunta, le expliqué de qué se trataba y se
mostró muy sorprendida (a diferencia de otras dos sentadas en sendos escritorios las cuales, con
su expresión, dieron a entender que estaban perfectamente al tanto del
robo/estafa y lo censuraban).
La pregunta del millón:
¿Cree usted, estimado
lector, que los responsables de la Dirección Regional de Transportes están
recibiendo una parte del dinero que vienen robando a los ciudadanos, los
centros autorizados para realizar los exámenes médicos?
Si así no fuera:
¿Por qué razón no han
tomado cartas en el asunto?
Reynaldo:
¡PONTE LAS PILAS!