AUTORIDADES IRRESPETUOSAS

(Piura, 05 mayo del 2015)

Luis Gulman Checa

“Respetos guardan respetos”, frase referida a que todos y cada uno debemos respetar y ser respetados, es decir, no es ético ni digno “atropellar” a nadie por sentirse superior o mejor que el abusado.

El comentario viene a cuento porque, pocos días atrás, leí opiniones de nuestra congresista fujimorista, quien, en calidad de tal, criticaba la malhadada decisión del Concejo Municipal de obligar a los conductores de motocicletas a utilizar cascos de “medio pelo”. Coincido con ella - en el fondo mas no en la forma -, pues los motociclistas que prestan servicio de transporte público deben ser erradicados en vez de  “favorecidos” con tan absurda norma.

Vayamos al fondo. En el país hay  autoridades de diversos rangos y competencias las que, en su ámbito, son o deberían ser autónomas al estar ahí por “decisión libre y soberana del pueblo y/o ciudadanía”. Además, siempre teniendo claro que nadie es mejor que otro ya sea por recibir un sueldo mayor y/o  ubicarse más arriba en la escala - alcalde distrital, provincial, gobernador, congresista/ministro, presidente de la República -,  incurre en grave falta de respeto el “superior” que, sin ton ni son, públicamente, ataca y denigra a un “inferior”. Además,  todas tienen tanto su ámbito de acción como sus competencias y obligaciones perfectamente establecidas y delimitadas.

Por ejemplo, cuando nos informamos que el presidente de la República visita un pueblo o gobernación y “jala las orejas”, “reprende”, “amenaza con cortar el flujo de dinero”, etc., personalmente siento profunda vergüenza ajena. ¿Por qué? Por cuanto, de acuerdo a la frase que encabeza el presente, ello es un desatino e inconducta presidencial porque no tiene derecho de maltratar  a nadie y, menos aún, a una autoridad electa tan legítima como él mismo.

Si usted, estimado lector, fuera el alcalde provincial de Piura, elegido por 89, 518 ciudadanos, y, eventualmente, se entera por los medios que el congresista por Piura, “Juan Pérez”,  que llegó al Congreso con 3,217 votos, declaró que usted es un ignorante, incapaz e incompetente, por lo que no se explica cómo es posible que  sea alcalde, pregunto: ¿Qué actitud asumiría o respuesta le daría?


En mi opinión, cuando alguna autoridad legítima es atacada y/o puesta en evidencia por otra “superior” y, en vez de hacerse respetar llegando al extremo, si fuera necesario, de echarlo de su territorio - digamos oficina -; revela ser indigno del cargo al defraudar a sus electores, los que, obvia y erradamente, eligieron a una persona con alma de gusano.