PIURA: ¿TIERRA BENDITA?
(Piura, 06 noviembre 2019)
Luis Gulman Checa
La triste y decepcionante información aparecida
el día de hoy dando cuenta de la captura del exgobernador de Tumbes, Ricardo
Flores Dioses, junto con ocho exfuncionarios de su gestión, por integrar, todos
ellos, una organización criminal al haber arreglado licitaciones y cobrado coimas
a las empresas contratistas; aunada a
las formidables gestas de fiscales lambayecanos llevando a la cárcel tanto a
dos exalcaldes provinciales de Chiclayo como
a quien fuera presidente de la Federación Peruana de Fútbol, Edwin Oviedo,
además de haber puesto la espada de Damocles sobre las cabezas de los excongresistas,
Javier Velásquez Quesquén y Héctor Becerril, entre otros, y, ante la CALMA
CHICHA envolviendo a los miembros del Ministerio
Público de Piura, no nos queda más que
exclamar, con el corazón rebosante de felicidad:
Gracias Dios, Señor
Nuestro, por habernos bendecido con autoridades y funcionarios honestos e impolutos
a los que los fiscales no pueden tocar ni con el pétalo de una rosa.
En honor a la verdad, el combate a la
corrupción en Tumbes es de larga data desde que ya viene purgando
carcelería un antecesor del citado Flores Dioses.
Luego de lo expresado líneas arriba, fundado en
hechos concretos, analicemos nuestra situación a través de otro cristal. Así,
empecemos rememorando cuánto tiempo ha transcurrido desde la primera clarinada
sobre el saqueo del que eran objeto las Unidades de Gestión Educativa
distribuidas en todo el departamento y, curiosa y/o misteriosamente, a pesar de
la permanente parafernalia informativa, salvo
error ú omisión, el Ministerio Público calla en siete idiomas.
Tan importante entidad, teniendo la función de
defender la legalidad, los derechos de los ciudadanos y los intereses públicos debería
actuar de oficio ante la mínima señal de que alguno de ellos viene siendo
tocado. Al respecto, pongo a vuestra consideración, estimado lector, una
reflexión:
¿Acaso, el M.P., no
debió poner en la picota al actual gobernador tan luego quedó claro que,
peyorativamente, creyó que su elección equivalió a ganarse un TINKASO como
quedó patente tanto con el reparto de cargos públicos de confianza a obvios
ineptos como con la irracional incorporación de inútiles e ignaros a las planillas públicas, tan igual como en
navidad los capos reparten panetones a los suyos?
Sin embargo, los casos mencionados podrían
equivaler a asuntos propios de pirañitas comparado
con el bárbaro saqueo implícito en la gestión del malhadado Alto Piura, mereciendo igual
calificación la existencia de dos proyectos, Chira Piura y Alto Piura, violando
una norma expresa y vigente, siendo, por ello, punible y despreciable el
silencio y/o inacción del M.P. en Piura.