LAS CUENTAS OFF SHORE NO SIEMPRE SON “TRUCHAS”
(Piura, 12 MAYO 2016)
Luis Gulman Checa
La edición de “Correo” de la fecha aparece
con llamada en primera plana:
Nueve empresas
piuranas figuran en el escándalo de los Panama Papers.
Lo primero por aclarar es que, en principio,
no es delito tener una cuenta de esa
naturaleza. Por lo tanto, descalificar a todos quienes optaron por guardar su
dinero usando un mecanismo perfectamente legal, deviene en grave injusticia.
Ahora bien, la situación varía radicalmente
cuando el titular, puesto en evidencia como viene sucediendo, no tiene cómo
demostrar el origen legal del dinero, siendo lógico y natural deducir que son recursos mal
habidos: narcotráfico, cohecho, etc.
Para entender claramente la situación
pongamos un ejemplo claro y didáctico con el burro por delante, es decir, el
suscrito:
Si este servidor hubiera
aparecido en la lista con una cuenta de m/m CUATRO MILLONES DE DÓLARES, la
opinión pública, automáticamente, se hubiera formulado la conocida pregunta:
¿De dónde pecata mea si no es de la sacristía?
Lo que significaría que por todos y cada uno
de los altos cargos públicos que desempeñé ejecutando sumas importantes de
dinero público, me habría dedicado a rapiñar a diestra y siniestra. Es
decir, hubiera quedado claro y patente que, en realidad, era un vil y vulgar
delincuente, como tantos cuasi demostrados y que, hasta ahora, siguen libres y
contentos.
Digresión: Felizmente mi caso
es al revés, por cuanto ingresé “rico” al sector público y me encandiló de tal
modo que dejé de tener lo que había tenido.
En consecuencia, estimado lector, paciencia y
buen humor hasta que la situación se aclare, como debería ser, y se propale una
información seria y veraz, como sería la siguiente:
El piurano don Fulano
de Tal (quien jamás tuvo fortuna), es titular de una de las cuentas panameñas
abierta el mes de ………. del año …………, que a la fecha registra un saldo
a favor de US $ 7’575,000.00.
¡Ojalá tal noticia nunca se haga realidad!