SOBRE GATOS, RATAS Y RATONES
(Piura, 13 julio del 2016)
Luis Gulman Checa
En “El Tiempo”, edición de la víspera, se
publica entrevista a nuestro Gobernador en la que, por primera vez, s. e. u o.,
califica como ratas a los corruptos enquistados en el organismo
que cayó bajo su mando desde hace algo más de 17 meses.
El epígrafe y/o síntesis de la misma, es el
siguiente:
“El mensaje claro
para todos es que no aceptaremos corrupción en la Región”
Tal declaración hubiera podido calificarse de
oportuna, atinada y respetable el día
que asumió el mando, la que, por lo demás, hubiera estado en perfecta
concordancia con el lema que, suponemos, lo hizo ser elegido:
¡EN LA HONESTIDAD
ESTÁ EL CAMBIO!
.Sin embargo - habiendo transcurrido tanto
tiempo desde asumió y, sabiendo que la
corrupción era un mal endémico, como, reitero, lo precisaba su lema -, me
desilusiona que recién, luego que los medios nos han atiborrado con
informaciones dando cuenta de permanentes y reiterados actos de corrupción
durante el largo tiempo que ha estado conduciendo la nave, se manifieste
con tanta firmeza y claridad.
Recuerdo que al inicio de su gestión me
permití darle un consejo por demás obvio:
El gato es el mejor
sino el único remedio contra ratas y ratones.
La interpretación del mismo es que, si en la
cabeza de una entidad se instala una persona honrada, de ahí para abajo todas
tienen que actuar de la misma manera.
Ahora, la disyuntiva sería la siguiente:
¿Cómo hace la cabeza
para transmitir/informar al universo de burócratas bajo su mando que, a partir
de la fecha, se instaló un gato ávido de terminar con cuanto roedor hay en la
entidad?
Considero que deben lanzarse don mensajes
claros e inequívocos:
Primero.- No tener en su
entorno ni una sola persona mínimamente
sospechosa de estar infectada por la corrupción, y
Segundo.- Designar en las Jefaturas
y Direcciones de la entidad, igualmente, a personas insospechables de
corrupción.
¿Habrá cumplido con
ambos indiscutibles principios?