PENA DE MUERTE: ¿JUSTICIA O VENGANZA?
(Piura, 12 febrero 2018)
Luis Gulman Checa
Para comenzar, la línea que divide ambos conceptos es tenue:
Justicia: Principio que lleva
a obrar y juzgar respetando la verdad
dando a cada cual lo que le corresponde.
Venganza: Desquite contra una
o varias personas en respuesta a una mala acción. Se interpreta como “equilibrar
la balanza”. En consecuencia, muchos aspectos de la venganza se asemejan al
concepto de justicia.
En “Semana” de “El Tiempo” del día de ayer se
publicó un artículo de Luis Castillo Córdova de la UDEP, en el que descarta y
condena la pena de muerte sea cual fuere el crimen/atrocidad perpetrado, por
cuanto, afirma, la Constitución del Perú
proclama que la persona vale como “fin supremo” y matar lo que tiene tal
condición no solo es una contradicción insalvable sino implica instrumentalizar
a la persona sacrificándola como medio al servicio de la sociedad.
También, como otros opinólogos, le
pasa la pelota a los gobiernos:
No
ejercen el poder para atender los graves problemas que como sociedad nos
aquejan, en el mejor de los casos por ignorancia, cuando no por verdadera
perversidad. Lo cierto es que promovemos la mediocridad de los poderes públicos
cuando les exigimos medidas facilistas y populistas como la pena de muerte.
Reflexión pertinente:
Los perros (cánidos)
cuando son infectados por la mortal rabia, ¿acaso no son sacrificados en el
acto preservando la vida de las
personas?
El señor Castillo, ¿habrá recapacitado en que
en estos atroces crímenes las personas involucradas son dos? En el caso de los
violadores de menores, de una parte el hijo de puta, figurativamente, violador y de la otra la personita en formación quien
sufrirá un trauma inimaginable/irreparable. Siendo así, ¿qué le suscita al señor
la situación/condición/estado de la persona violada, también protegida por la
Constitución, imperfecta obra humana?
Dios no lo permita, pero, especulando, ¿cuál sería
la opinión del señor Castillo si una hija o nieta suya (desconozco su edad) de
4 o 5 añitos fuera violada por una bestia con apariencia humana?
Propuesta:
Los violadores deben
ser ejecutados los días domingo a las 12.00 horas en la plaza principal de la
ciudad cortándoles los cojones con una
tijera sin filo, dejándolos desangrarse
hasta que la muerte los elimine de este mundo.
Estimado lector, en su opinión:
¿Tal pena sería justicia o venganza?
Reflexión final:
Semejante pena, ¿no
reduciría al mínimo la proliferación de violadores?