LA QUIMERA DEL AGRO

(Piura, 01 diciembre 2018)

Luis Gulman Checa

Un lúcido y objetivo informe publicado en la edición de “El Tiempo” de la fecha referido al abandono/atraso en el que se debaten  decenas de miles de hermanos nuestros, en el distrito de Tambogrande, al carecer del imprescindible insumo para la vida: EL AGUA;  me hizo ver la penosa realidad que, en Piura, el progreso y bienestar que debiera generarnos la actividad agrícola, continúa siendo una quimera.

Tambogrande espera el agua desde hace más de 40 años.

Veinte mil familias de los caseríos de la margen izquierda del río Piura padecen de sed.

La zona referida se ubica a tiro de piedra de la Colonización San Lorenzo que años atrás celebró sus bodas de oro. Considerando el tiempo transcurrido desde que tan formidable emporio de producción agropecuaria empezó a operar y si de verdad hubiera cumplido con las metas consideradas en su planificación, a la fecha, la situación de los abandonados piuranos que menciona el informe, debería ser absolutamente contrapuesta a la que siguen sufriendo: agua potable a borbotones, alcantarillado, calles y veredas pavimentadas, colegios de primera, etc.

Mirando a otros horizontes como, por ejemplo, el propio Tambogrande y/o Las Lomas, principales centros poblados inmersos en la Colonización, llegaríamos a la misma conclusión: ni con lupa identificaríamos los beneficios que tendrían que lucir incontenibles si el agro no fuera una quimera.  

Digresión:

La vergüenza debiera consumirnos cuando vemos, pasando la frontera, la ciudad de Macará: una urbe de otra galaxia comparada con nuestros misérrimos  poblados fronterizos.

Sin embargo, la situación de estas personas se torna aún más absurda/irracional por cuanto les  calza a pie juntillas  la conocida expresión: El Perú es un mendigo sentado en un banco de oro, aunque, en el caso presente, es de cobre. Sí, estimado lector, en esta zona, en la jurisdicción de la Comunidad Campesina Apóstol Juan Bautista de Locuto, se ubica un yacimiento de cobre profundamente hundido en el sub suelo. Sin embargo, inexplicablemente, sucesivas autoridades locales incalificables pero merecedores del calificativo de anti peruanos y, peor aún, asesinos de a pocos de humildes campesinos al impedirles  disfrutar de las riquezas que Dios puso a su disposición; los mantienen en tan deplorable estado y condición.


Me pregunto:

¿Qué línea adoptarán los medios de información respecto a lo manifestado en el presente, especialmente, teniendo en consideración que la minería informal,  ilegal y contaminante se ha desatado en las alturas de la cuenca contaminando el agua almacenada en ambos reservorios piuranos?

Y repregunto:

¿Sufrirán la vergüenza de continuar oponiéndose a la explotación técnica, legal y racional de estos recursos,  cuando, paralelamente,  callan en siete idiomas ante la bárbara y criminal explotación señalada en las alturas?