FÚTBOL: ¿PAOLO SUMÓ O RESTÓ?
(Piura, 23 junio 2018)
Luis Gulman Checa
Aunque con un partido pendiente, el equipo
peruano ya quedó eliminado en la primera etapa, es oportuno analizar si la
interminable ¿telenovela? que significó la suspensión a Paolo con su ¿feliz? resultado,
fue positiva o negativa.
Digresión:
Me refiero, única y exclusivamente al fútbol,
ese deporte practicado por 11 contra 11 en un rectángulo y es llamado el “rey
de los deportes”, mas no a los comerciantes de Gamarra, los Centros
Comerciales, los Bancos, las Agencias de Turismo, los Medios de Comunicación y los
Políticos, a todos los cuales les ha ido de maravilla al haberse trepado, con
gran visión y oportunismo empresarial, al coche del siempre vapuleado fútbol
peruano, como lo demuestra la ínfima asistencia a los encuentros del torneo
local.
Considero que la citada TN fue una desgracia
para la moral/funcionamiento del magnífico y sólido equipo armado por Ricardo
Gareca. Recordemos que sin la presencia de Paolo el equipo, sobria y fríamente,
no solo ganó el repechaje ante Nueva Zelanda sino que mantuvo un récord
impresionante en los varios partidos de preparación.
Pongámonos en los zapatos de nuestros
futbolistas quienes, a pesar de sus éxitos indiscutibles, implícitamente, a
consecuencia de la tal TN, se les estaba considerando como meros y sustituibles
complementos del Depredador, el Atila de las áreas enemigas, el Hombre gol del
Perú, el gran e inigualable Paolo Guerrero. Pregúntese, estimado lector:
¿Cómo habrá impactado
en la moral de los jugadores ver que a la hora undécima, uno de sus compañeros,
sólidamente integrado al grupo, recibió una patada en el fundillo siendo
devuelto a Lima?
Me pregunto: Los responsables del equipo
peruano, ¿ni siquiera consideraron la posibilidad de que Sergio Peña continuara
acompañando a nuestra delegación hasta el fin del torneo? ¡Qué brutos!
Considero que a Gareca le faltó carácter
porque en su oportunidad debió precisar que el equipo ya estaba decidido por
cuanto ni él ni los jugadores podían, a pocos días del inicio del torneo, estar
con una espada de Damocles pendiendo sobre sus cabezas, por cuanto,
ello, ni más menos, significaba la “bendita” TN.
Finalmente, Paolo no solo desarmó el
funcionamiento del equipo sino que, por un grueso error suyo, Francia logró el
gol que nos eliminó.