LOS PUEBLOS TIENEN LOS GOBERNANTES QUE SE MERECEN

(Piura, 13 junio 2018)

Luis Gulman Checa

Es difícil de entender la abulia/desinterés generalizado de la ciudadanía, de capitán a paje, respecto a los procesos electorales para escoger quien -  ¿de los innumerables personajes  dispuestos a sacrificarse dejando sus intereses personales de lado para velar, única y exclusivamente, por el progreso y bienestar y de sus gobernados? - merece ser elegido.

Reflexionemos:

¿Qué pensar de una persona, aparentemente, “leída y escribida”, que,  al ser preguntada por quién piensa votar para alcalde de Piura el próximo octubre, responde: “todos son una porquería, no sirven para nada”?

A pesar que, desde niño, aprendí de mis mayores que no es propio, en cierta clase de reuniones, hablar de dinero o política; recientemente, al oír tremendo desatino, decidí meter mi cuchara:

Yo votaré por Pablo Zegarra, hijo del recordado Don Pablo, ejecutivo impecable del Banco Regional del Norte y, me consta, hombre dado al servicio de la sociedad como lo demostró cuando fuimos compañeros, por varios años, en el Comité Directivo de la Alianza Francesa logrando grandes éxitos (vean el local propio que ostenta). Además, es un destacado profesional, arquitecto, y probadamente persona de bien sin RABO DE PAJA alguno.

Como ya me había metido en el baile, opté por continuar:

Además, va en la lista encabezada por Jhony Peralta, aspirante a Gobernador en reemplazo de Reynaldo, por quien también votaré igual como hice el 2014. ¿Por qué? Por cuanto, si fuera verdad lo expresado en el exabrupto citado líneas arriba, lo menos que podemos hacer es optar por quien nos parezca el mejor preparado  de acuerdo a sus antecedentes. Así, JPC, nació en una familia aprista (la corrupción que infectó al partido luego de la desgraciada aparición de AGP no puede manchar/denigrar a los apristas auténticos), ha sido concejal y congresista habiendo presidido la Comisión de Economía, ergo, tiene experiencia en la cosa pública, lo que no se logra produciendo y/o exportando mangos.