OTRA MALDITA REFORMA AGRARIA?

(Piura, 05 junio 2018)

Luis Gulman Checa

Recordemos cómo la Reforma Agraria, decretada por el Gobierno Revolucionario de la Fuerza Armada, liderado por Juan Velasco Alvarado - aceptando que su mente cuadriculada le hizo creer que, realmente, estaba originando una real distribución de la riqueza -; liquidó la agricultura en el Perú sumiendo en la pobreza  cientos de miles de hombres del campo.

Ahora, cuando la agro exportación está creciendo como la espuma, sin duda gracias a la Ley N° 27360, promulgada en las postrimerías del gobierno de AFF, estableciendo un régimen privilegiado para las agroexportadoras, como exoneraciones tributarias y otros beneficios con vigencia hasta el 31 de diciembre del 2021; los antis, malos o enrevesados peruanos que se oponen a todo lo que implica desarrollo con el argumento de que el jamón lo cortan unos cuantos en su propio beneficio a base de explotar al cholo barato (frase de ellos); están pidiendo a gritos la derogatoria de la misma.

Así como los miembros de esta caterva de anti peruanos  pusieron el grito en el cielo ante los decretos promulgados por PPK antes de dejar el cargo, autorizando la exploración y explotación petrolífera en cinco lotes ubicados en el Mar de Grau (anulados por Martín Vizcarra decretando así el inicio de su fracaso) por cuanto, adujeron,  no se había solicitado la licencia social; planteo la siguiente reflexión:

Estos evidentes resentidos sociales, ¿habrán obtenido tal licencia de los cientos de miles de trabajadores que han mejorado en gran medida su status económico gracias al floreciente desarrollo de la agro exportación, para oponerse a la prórroga de la ley por otros veinte años?

La citada Ley, ¿es tan perfecta que parecería haber sido diseñada por una comisión integrada por el Espíritu Santo, el rey Salomón y Albert Einstein? Por supuesto que no, por cuanto, como toda hechura del hombre es perfectible, lo que en criollo significa que puede mejorarse/perfeccionarse.

No olvidemos que el único animal sobre la tierra que tropieza dos veces con la misma piedra es el hombre, por lo que sería imperdonable que, transcurrido m/m medio siglo del crimen perpetrado por JVA ante la abulia/estupidez de los peruanos (mis respetos dignos arequipeños),  volvamos a permitir que unos cuantos desquiciados se salgan con la suya logrando extinguir la vigencia de la Ley, frenando o liquidando el desarrollo de la agro exportación y, lo peor, dejando sin trabajo a tanto peruano que, al igual que los ricos, también se ha beneficiado.

¡NO DEROGACIÓN, SÍ PERFECCIÓN!