SEÑOR PRESIDENTE: ESTÁ ERRADO

(Piura, 14 abril 2019)

Luis Gulman Checa

El presidente de la República, una vez más, nos visitó en un típico e inútil viaje proselitista con el pretexto de inaugurar algunas obras públicas de menor cuantía en la serranía piurana, aprovechando, irresponsable y demagógicamente, para lavarse las manos respecto a la ejecución de las ¿benditas? obras de la llamada “Reconstrucción con Cambios”, dejándolas a cargo de entidades probadamente incompetentes y/o corruptas, como son los gobiernos locales y el gobierno regional de Piura.

En mi condición de piurano, por los cuatro costados, la información aparecida en primera plana de “El Tiempo” del pasado día sábado, me origino gran desazón:

Jalón de orejas a las autoridades

Transferimos presupuesto a las autoridades piuranas, pero de nada sirve si se queda en la cuenta, sin usar.

Al cumplirse los tres primeros meses de gestión edil, les pidió rapidez al ejecutar los fondos de la reconstrucción: ”No hay pretexto para retrasar las obras”. 

¿Será posible que el mandatario desconozca la  interminable cantidad de obras que estuvieron a cargo de estas entidades y permanecen tiradas y a medio construir y/o supuestamente terminadas y canceladas pero sin entrar en servicio por deficiencias insalvables y/o si entraron en servicio al poco tiempo mostraron graves deficiencias constructivas?

Si el gobierno no corrige el tremendo despropósito perpetrado, no se requiere ser adivino para predecir que, en el futuro próximo, tanto los fiscales (me refiero a los correctos mas no a los que se venden por un plato de lentejas)  como los tardíos fiscalizadores de Contraloría General, tendrán arduo trabajo denunciando y espulgando la serie de tropelías que se cometerán con los fondos, cándida e irresponsablemente, asignados a tales entidades.

En el caso del GRP - actualmente rumbo al colapso total al haber caído en manos de una persona que, en el poco tiempo que lleva a cargo  ya reconfirmó no solo su absoluta incapacidad, sino que, para empeorar el futuro, como lo prueba su incalificable propuesta de cambiar el logo de la entidad señalando que  no costará n un centavo, está revelando que, realmente, se trata de un lobo con piel de cordero cuyos reales propósitos se irán revelando de a pocos -, basta y sobra con traer a colación el manejo realizado con el vilipendiado Proyecto Alto Piura por tres administraciones sucesivas sin que haya cambiado la tónica con la actual; para concluir que no está calificado para manejar ni un centavo de la “cacareada” Reconstrucción.