ZAPATERO A TUS
ZAPATOS
(Piura, 02 abril 2019)
Luis Gulman Checa
No dudo que las quejas de los piuranos sobre la lenta o casi nula
tarea de ¿reconstrucción? tras los daños achacados al bautizado “Niño Costero” del 2017, se deben a
que, desde el primer momento, se cayó en el terrible error sintetizado en el
adagio:
Muchas manos en un
plato hacen mucho garabato.
El asunto empeora al persistir en tan craso
error, como lo demuestra el titular de primera plana de la edición de “El
Tiempo”, de la víspera:
Iglesia se ofrece
para impulsar pedido de atención para Piura.
El arzobispo de Piura y Tumbes, José Eguren, asegura que responderá positivamente si las
autoridades políticas solicitan su intervención.
Exige al GORE decir cómo se harán hospitales. También
criticó bajísimos niveles de inversión y la designación de funcionarios no
idóneos.
Es decir, “conmemorados” dos años de la catástrofe,
cuando en un país auténtico no quedaría ni una señal de los inconvenientes
originados por el clima, en Piura seguimos enfrascados en el debate de quién,
cómo y con qué debe asumir la tarea reparadora.
Hecho tan lamentable, obligatoriamente, nos
lleva a la conclusión que las autoridades competentes, elegidas por nosotros,
lejos de haber asumido la función que les correspondía como líderes, tal y como
lo hace el capitán del barco que enfrenta una tormenta y toma decisiones
instantáneas e indiscutibles para evitar zozobrar; optaron, imitando al
avestruz, por enterrar la cabeza en un hueco dejando a sus gobernados, los
piuranos, en manos de los inefables “limeños”, como, por ejemplo, el
fatal des colmatador quien, para burla y escarnio de todos
nosotros, resultó un “limeño” oriundo
del Bajo Piura.
Para empeorar la situación, hemos olvidado
que, mientras el hermoso caballo fue creado por Dios, el horroroso camello fue
fruto de una comisión, y, a sabiendas de ello, se sigue proponiendo la
participación de colectivos (rimbombantes y vacuos), organizaciones de toda
clase, universidades, colegios profesionales y otros integrados en una comisión
encargada de llevar a cabo la
tarea.
¿Será concebible peor
absurdo?
El flamante líder propuesto por “El Tiempo”,
nuestro pastor, de entrada cae en una grave contradicción, pues, sostiene, de
una parte, que el grupo salvador debe estar liderado por el gobernador,
Servando García, mientras que, paralelamente, descalifica y hace cera
y pabilo del mismo achacándole la responsabilidad tanto por el
pobrísimo nivel de ejecución presupuestal del GORE como por la reiterada
burrada de designar funcionarios ignaros, incompetentes y, definitivamente, no
idóneos.
Así las cosas:
¿QUIÉN PODRÁ
SALVARNOS?