AGP: OTRO DESESPERADO
(Piura, 01 marzo 2016)
Luis Gulman Checa
Francamente la situación de la política en
nuestro país está para echarse a llorar. Basta con leer la relación de postulantes
a la presidencia de la República para confirmar lo expresado:
¡Es increíble la
cantidad de ¿idiotas?, ¿huachafos?, ¿ridículos?, ¿impresentables? y/o
¿corruptos? que la integran!
En el caso de AGP, dos veces gobernante y
supuestamente inteligente:
¿No fue capaz de “pesar”
todas las circunstancias y quedar en la historia como el primer (¿y
único?) aprista dos veces elegido para gobernarnos?
Está claro que no y reconfirmó que su problema con el ego no es
un decir sino una cruda y fatal realidad que juega en su contra. Ello ya había
quedado demostrado a raíz de los
llamados “Petroaudios”, cuando, insidiosa y arteramente, aprovechó para “bajarse”
a Jorge del Castillo quien, a la sazón, se perfilaba como el lógico y natural
candidato del partido a la presidencia de la República.
El principio que rige la vida de AGP en
relación al partido es el siguiente:
Después de mí, el
diluvio.
Tengo a la vista la edición de “Correo” del
pasado 28 de febrero con la siguiente llamada en primera plana:
ALAN DICE QUE NO
PRIVATIZARÁ LA EPS GRAU
Dicha afirmación es tan vacua e inocua como
si se hubiera comprometido a impedir que la OTAN lance una bomba atómica para
borrar el EI de la faz de la tierra. ¿Por qué? Por cuanto su influencia en ella
es tan inexistente como la que el presidente que sea elegido tendrá para
decidir el futuro de la colapsada empresa de saneamiento que, contra su razón
de ser, nos está matando.
No dejo de asombrarme al constatar cuán
pícaros, mentirosos y pobres diablos son la mayoría de candidatos en campaña.
Es evidente que a los
piuranos AGP nos toma por tarados, salvo que haya olvidado que, en el mitin de
cierre de campaña para las elecciones
del 2006, en las que fue electo, juró sobre la tumba de sus antepasados y por
la vida de sus hijos, que eliminaría los Services y vetaría el TLC con los
Estados Unidos, haciendo todo lo contrario.