LA VACA SE OLVIDÓ CUANDO FUE TERNERA

(Piura, 22 agosto del 2016)

Luis Gulman Checa

El dicho  me vino a la mente ante las airadas exigencias planteadas al Primer Ministro  por integrantes de la bancada fujimorista en el Congreso - cuasi condicionando su voto aprobatorio -, para que eche del aparato público a los remanentes del pasado gobierno de Ollanta Humala.

¡Qué tal  falta de sangre en la cara la de estos congresistas, quienes, siendo afines o descendientes directos del calificado GOBIERNO MÁS CORRUPTO DE LA HISTORIA DEL PERÚ, ahora, como si hubieran nacido del vientre de Santa María Virgen, impolutos y sin mancha, alardean de una honradez a la que, éticamente, están imposibilitados de apelar!

Un sencillo recordatorio, a modo de comparación, para ubicarlos correctamente:

·         Mientras su mentor apeló a un golpe de Estado para atornillarse en el cargo, destrozó los entes tutelares y fundamentales de la República para hacer y deshacer a su antojo y, probada y documentadamente, potenció a la estratósfera la corrupción en todas las esferas (gracias Vladi por tu manía fílmica); su vilipendiado Ollanta, a quien no calificaré de santo porque éstos solo deben existir en el cielo y  debe haber perpetrado algunos pecadillos veniales, gobernó “sin muertos ni heridos” y retornó a su casa cumplido el tiempo fijado por  ley.

·         Mientras su mentor fugó del país con cuchocientas maletas con contenido  desconocido pero  imaginable, renunciando al cargo por medio de un fax; su vilipendiado Ollanta, realizó una entrega digna, oportuna y muy honrosa del cargo que le fuera conferido.

Basta de comparaciones, principalmente porque podrían zaherir  damas, lo que no es digno ni aceptable, por cuanto: A la mujer, ni con el pétalo de una rosa.

Como demostración del irracional y circense pedido de estos congresistas, poniendo al burro por delante, relataré una situación del pasado que los desmiente.

El suscrito fue alto funcionario del llamado GOBIERNO MÁS CORRUPTO DE LA HISTORIA, al haber sido ratificado en cargos a los que había accedido por decisión del gobierno de la Región Grau - disuelto el 05 de abril de 1992 -siendo ratificado por Resoluciones Supremas rubricadas por el Presidente de la República, el Ing. Alberto Fujimori.


De acuerdo a la exigencia planteada al Primer Ministro por estos inconsecuentes, retrotrayéndonos en el tiempo, luego de la fuga del presidente Fujimori, su reemplazante, Valentín Paniagua, debió lanzar una cacería feroz e inmisericorde contra los funcionarios del prófugo, lo que no ocurrió. ¿Por qué? Por cuanto, como en toda situación, circunstancia u organismo, se mezclan los buenos y los malos.

Así, en el caso que me compete, estuve entre los buenos, concretamente, entre otros,  en el Sector Energía y Minas a cargo del Ing. Daniel Hokama.

Pregunta para estos incalificables congresistas:

Acaso el Ing. Hokama, a diferencia de tantos otros funcionarios fujimoristas, como por ejemplo un tal General E.P. Chacón (quien creo tiene un fruto de su simiente en el Congreso), ¿fue denunciado, acosado, enjuiciado y encarcelado por ladrón?

Por supuesto que no. ¿Por qué? Por cuanto lideró, honesta y limpiamente, una campaña que transformó, para bien, la producción, transmisión y distribución de energía eléctrica a lo largo y ancho del país.

Señores congresistas fujimoristas, les ruego:

Tengan siempre presente que vuestra presencia en el Congreso no es para servir a nadie en particular sino, única y exclusivamente, para legislar, fiscalizar y representar teniendo siempre como único norte el bien y el progreso del país y los peruanos, vuestros electores.