ESPANTOSO RIDÍCULO
(Piura, 06 octubre 2020)
Luis Gulman Checa
Es increíble cómo personas, supuestamente pensantes,
metan la pata hasta rodilla. ¿Qué o
quién me motiva? Una pequeña nota publicada en “El Tiempo”, edición de la
víspera:
Consejo de la UNP se
opone a declarar el 8 de octubre laborable.
Los miembros del Consejo Universitario expresaron su
rechazo a tal medida al considerarla un ATENTADO CONTRA LA MEMORIA DE MIGUEL
GRAU.
¿Acaso no deviene en risible que un ente como
la UNP, en cuidados intensivos en lo referente a moralidad - según figuradas puñaladas por la espalda
propinadas entre ellos mismos -, se cuelgue de la memoria de personaje tan
egregio tratando de ganar indulgencias con ave marías ajenas?
El real, verdadero y cotidiano atentado contra
la memoria de personaje tan ilustre lo perpetran todas las personas,
especialmente funcionarios, que roban, mienten y/o sangran al erario sin
cumplir sus tareas; entre varias otras inconductas que, no tengo la menor duda,
deben mantener el alma del Almirante sumida
en la mayor de las tristezas.
Sigo imaginando y especulo respecto a lo que
debe estar meditando:
Pensar que por esta
manga de vagos, pícaros y sinvergüenzas ofrendé mi vida dejando en el desamparo
mi propia familia.
¡Cuidado! No me refiero únicamente a los responsables
del citado comunicado sino a todos quienes, hipócritamente, mientras de la boca
para afuera rinden pleitesía a la memoria del Almirante, en la vida real son
unos auténticos h. de p. (en el contexto del debate Mario Vargas Llosa vs.
Hernando de Soto) pasándosela traicionando a su patria, es decir, en la senda
contraria a la marcada por quien, perversamente, dicen admirar.
Mirando el 08 de octubre tras otro cristal, ¿es
una fecha que debería extasiarnos como
si celebráramos la conquista de un campeonato mundial de fútbol (con perdón de los denigradores de tal
deporte) o, por lo contrario, significó una crucial derrota que le dejó el
camino libre al envidioso invasor chileno para saquear nuestro país y
apropiarse de parte de nuestro territorio?
En consecuencia, más que una fecha para celebrar
(lo que justificaría un día de fiesta), es un día para honrar la memoria de un
personaje extraordinario, siendo la mejor forma de hacerlo, no con desfiles
adefesieros sino imitándolo en cuanto al ejemplo que nos dejó referido al cumplimiento
del deber.
Un auténtico homenaje a la memoria del Almirante, en vez de mendigar rogando por
feriados, sería imitar a los japoneses cuando van a la huelga:
El 08 de octubre de
cada año trabajar 15 horas al día sin cobrar sueldo ni salario.
