CONSEJO PARA PABLO
(Piura, 10 mayo 2017)
Luis Gulman Checa
En la edición de “El
Tiempo” del día de ayer apareció una preocupante información con llamada en portada y la respectiva
fotografía del declarante:
PABLO
DE LA FLOR
Ciudadanos
podrán vigilar la reconstrucción.
Tal declaración me
suscitó dudas, temores e interrogantes:
·
¿Quién, cómo y porqué representaría a los
ciudadanos?
·
Si el Gobierno Nacional te ha dado su confianza
(y tu mirada/expresión indican eres
digno de ella), ¿qué diablos tendría que ver la ciudadanía que es un ente
informe, irracional e imposible de identificar?
·
Si quieres cumplir digna e idóneamente con el
encargo recibido, tendrás que usar tu
autoridad decidiendo qué y cómo hacerlo,
luego, eso sí, de analizar las respectivas opciones con tu equipo que escogerás
tú mismo y, obviamente, merecerá tu absoluta confianza. Es decir, podrás
meter las manos al fuego por la confiabilidad de cada uno de ellos.
Señalaré algunos
antecedentes de la “ciudadanía” - me refiero a la de la tierra de tu padre y mía -
para que obtengas algunas conclusiones:
·
Piura tiene en sus entrañas ingentes riquezas
minerales, los cuales, como sabes, no solo son imprescindibles para la vida
sino que, también, generan recursos y bienestar para los habitantes del
entorno. Sin embargo, por la oposición
de un grupúsculo de “convenidos” (oenegeros, narcotraficantes, mineros ilegales
y medios y periodistas incalificables), las mismas no solo continúan
inexplotadas sino que, para peor, la minería informal/ilegal/delincuencial (ante
el silencio de los mencionados) se multiplica más rápidamente que el dengue.
¿Qué han dicho o hecho los “ciudadanos” al respecto?
NI UNA SOLA
PALABRA.
·
El servicio de saneamiento en el departamento
es un desastre por cuanto es propiedad de los municipios, los cuales, como
imaginarás, a través de la gran mayoría de alcaldes, los usaron para contaminar
las planillas con ahijados, entenados y
un sinfín de inútiles e in competentes pagando favores, es decir, mientras
continúe en esas manos, no hay forma que la situación mejore. Sin embargo,
apareció una luz en el horizonte representada por la posibilidad de ceder
en concesión el servicio de saneamiento a un operador privado. Sin
duda, hasta los piajenos piuranos hubieran estado de acuerdo si hubieran sido
consultados, pero, los ciudadanos,
directos perjudicados por tan crítica situación de servicio tan básico y
fundamental, ¿apoyaron la citada concesión?
NO, AL
CONTRARIO, SE OPUSIERON.
·
En Piura, desde tiempo inmemorial, existía el
anhelo de mejorar el riego en el ubérrimo valle del Alto Piura derivando las
aguas del piurano río Huancabamba. Luego de años de idas y venidas, avances y
retrocesos, el anhelo se hizo realidad, pero,
fatalmente, el encargado de sacar
adelante el proyecto lo prostituyó/enterró por la maldita infección
generalizada en el Perú: la corrupción. Una vez más, no solo la
ciudadanía sino, peor aún, los medios de comunicación que fueron advertidos clara y fundadamente del desastre
que se avecinaba, ¿qué hicieron?
NADA DE NADA Y EL
PROYECTO FENECIÓ.
Conclusión:
¡Si
cometieras el tremendo error de “darle pelota” a los ciudadanos, fracasarás
estrepitosamente incumpliendo con el encargo que has recibido!