¿Y EL HOTEL?

(Piura, 17 mayo 2017)

Luis Gulman Checa

A Dios gracias que el suplemento dominical SEMANA de “El Tiempo” llevó a cabo una formidable, altruista, desinteresada y exitosa campaña contra la construcción de un hotel  sobre la margen derecha del río Piura, aguas arriba del puente Cáceres, por cuanto, de haber estado en ejecución durante la última crecida del río, la ciudad, que sufrió los daños por todos conocidos, hubiera sido borrada del mapa, tal y como lo advirtió tan sesuda, respetable y seria publicación.

Obviamente, por si alguien no lo hubiera notado, el párrafo precedente es sarcástico, significando absolutamente lo contrario de lo que dice, al  haber quedado más claro que el agua (no me refiero a la que inundó la ciudad que era turbia y sucia al extremo) que la referida obra, que ojalá se edifique lo más pronto posible para  bien de Piura y los piuranos, no tendrá efecto alguno sobre el libre discurrir del río ni sobre la súper estructura del puente, el cual, como acaba de confirmarse, es de gran calidad  y a prueba de balas.

El episodio referido - el non sancto berrinche de SEMANA - nos debe llevar a analizar la labor que realizan los medios en Piura concluyendo que, lejos de educar, orientar, guiar y advertir a la ciudadanía, permanente y didácticamente, sobre asuntos/temas de interés y trascendencia para que nuestra vida se desarrolle de la mejor manera; han caído en el amarillismo más infame y/o defensa de protervos intereses privados, levantando y difundiendo escándalos, los cuales, si fueran auténticos medios de expresión cumplidores de su deber señalado líneas arriba, jamás se hubieran producido.

Un ejemplo claro de lo expresado en el párrafo precedente:

Pocos días atrás los medios difundieron que la infraestructura de riego de la Colonización San Lorenzo había colapsado y, en consecuencia, no solo corrían el riesgo de desaparecer “cuchocientas” mil hectáreas plantadas con árboles frutales sino que, además, los moradores de las poblaciones circundantes estaban en serio peligro de morir de sed.

Asumiendo que tal información hubiera estado ajustada estrictamente a la verdad, razonemos preguntándonos la razón por la que colapsó  cuando otras obras de fierro y cemento de similar antigüedad, como por ejemplo la Unidad Vecinal de Piura, continúan firmes y enhiestas.


¿Acaso no era competencia de los medios llamar la atención, desde décadas atrás, tanto de autoridades como de la ciudadanía, de la criminal y bárbara negligencia de regalar la valiosísima agua regulada olvidando la imprescindible tarea permanente de mantenimiento (como sí sucede en la Unidad Vecinal), de la infraestructura de riego por falta de recursos económicos?