¿BONOS  DE  RECUPERACIÓN?

(Piura, 20 horas del 04 julio 2017)

Luis Gulman Checa

Recién tomé consciencia del indebido y discriminatorio obsequio del Estado a agricultores piuranos, al leer, con detenimiento, información publicada en la edición de “El Tiempo” de la fecha:

Amplían plazo de inscripción para bonos con el fin de incluir a tres mil agricultores

La Dirección Regional de Agricultura indicó que a fin de mes se cierran las inscripciones para entregar bono para afectados.

A los S/. 5 millones iniciales destinados para el bono agrario en Piura, El Minagri evalúa agregar nueve millones más.

¿De qué trata el asunto? De que el Estado peruano, es decir, estimado lector, usted, el suscrito y TODOS LOS PERUANOS, vamos a obsequiar dinero, contente y sonante,  a m/m 20,000 agricultores piuranos.

“El bono es equivalente a mil soles por hectárea que haya sido afectada por los embates de la naturaleza, a fin de apoyar al pequeño agricultor mientras se lleva a cabo la Reconstrucción” (?)

Me viene a la mente un concepto filosófico que nadie ha podido desmentir:

¡CUANDO LLUEVE, TODOS SE MOJAN!

Entonces, siendo tal verdad irrefutable y las lluvias (que fueron de dos por medio) mojaron a todos los piuranos, ¿por qué el Estado regala dinero a un sector que, desde décadas atrás y permanentemente, recibe una dádiva inconmensurable  como es disponer y malgastar la costosísima agua regulada?

Para hacer más patente y grave la discriminación,  los agricultores fueron los principales beneficiados por las lluvias, habida cuenta que la sequía (INVENTADA POR ELLOS MISMOS AL PLANTAR, ESTÚPIDAMENTE, DOS CAMPAÑAS DE ARROZ) estaba arruinando sus cultivos, ergo, ya fueron bendecidos por la naturaleza.

Tengo entendido que nuestra Constitución Política establece que todos los peruanos somos iguales ante la ley y también, obviamente, cuando el Estado decide regalar dinero.  Por ello debiéramos preguntarnos en qué se basó el Gobierno para determinar esta dádiva sectorizada olvidando, como si fueran chilenos o marcianos, por ejemplo, a los siguientes grupos de piuranos:








·         Los transportistas que no pudieron circular por carencia de puentes.

·         Los taxistas quienes, sabrá Dios hasta cuando, destruirán de a poco sus vehículos al verse obligados a transitar sorteando cráteres.

·         Los ciudadanos que, por incompetencia/ignorancia/abulia de las autoridades “responsables”, sufrieron la inundación  de sus viviendas y, reparándolas, están gastando plata como cancha.

·         Los sufridos vendedores ambulantes del mercado, que no pudieron “trabajar” a causa de las mismísimas lluvias que “afectaron” a los ¿bendecidos? agricultores.

·         Continúe usted, estimado lector.

Digresión final:

Los medios piuranos han dejado de lado uno de los fundamentos de la prensa auténtica: LA OPINIÓN. ¿Por qué? Por cuanto, imitando a las loras, se limitan a difundir declaraciones (muchas de sub normales) haciendo de simples cajas de resonancia. Así, pecan por omisión  y desnaturalizan su razón de ser.