SEAMOS REALISTAS: LA SOLUCIÓN ES INVERSIÓN PRIVADA

(Piura, 16 mayo 2019)

Luis Gulman Checa

Analicemos, fría y calmadamente, la situación que afronta el Perú referida a carencias de diferente índole que van desde escuelas y hospitales públicos, verdaderos desastres por desabastecimiento, estrechez y falta de profesionales, entre otros males; como, también, necesarias  obras de infraestructura - carreteras, reservorios, sistemas de irrigación, etc. - que potenciarían la producción del país y consiguiente bienestar de los peruanos.

Ante tal realidad,  preguntémonos cómo debería  priorizarse el uso de los escasísimos recursos del erario (comparados con la enormidad necesaria para satisfacer los requerimientos), es decir, ¿sería racional continuar dejando en el abandono  la salud y la educación para destinar recursos públicos, por ejemplo,  a la  construcción de represas que, como ha quedado demostrado, servirían para que irresponsables agricultores mal utilicen sin pago alguno la costosa agua que regularían plantando cultivos de dos por medio?

Por si acaso, la propuesta no equivale a descubrir la pólvora por cuanto la participación de los privados en servicios públicos se ha difundido  ampliamente a través de ceder la administración de carreteras, puertos, aeropuertos, sistemas de conducción de energía eléctrica y otros,  a entes privados con magníficos resultados.

Digresión:

Si alguien estigmatizara  la inversión privada ante los recientes destapes referidos a las concesiones acordadas por la Municipalidad Metropolitana de Lima,  no solo pecaría de irracional sino también admitiría  que en el Perú no quedó un ser digno, en cuyo caso no habría otro camino que pedir a las Naciones Unidas el envío de una COMISIÓN MULTINACIONAL para administrarnos por unos 50 años, lapso durante el cual los corruptos habrían desaparecido y la pléyade de nuevos ciudadanos, dignos y honestos,  estarían aptos para retomar el gobierno de la nación..

Tomando al toro por los cuernos, analicemos uno de los puntos exigidos por los agricultores dentro de su amplio pliego de reclamos que los llevó a paralizar el país por dos días:

Las inmediata construcción de las represas de Santa Rosa y Vilcazán para garantizar y optimizar el riego en el valle de San Lorenzo 





Personalmente, considero que ambas debieron construirse desde mucho tiempo atrás, como también las solicitadas por los alto piuranos en algunos afluentes del río  y todos los embalses que se mencionan para paliar la pérdida de capacidad de almacenamiento del reservorio de Poechos por efecto de la inevitable colmatación; siempre y cuando sea bajo las siguientes condiciones:

Promover e incentivar a inversionistas privados para que, siguiendo el orden legal que permitió la construcción de las tres CC. HH. de SINERSA en el Sistema Chira Piura, o el gran desarrollo emprendido por Maple plantando más de 10,000 Has. de Caña de Azúcar en el despoblado utilizando el agua del río Chira que se perdía en el mar; para que construyan los reservorios que operarán y mantendrán a cambio de cobrar el justiprecio por el agua que regulen.

Termino reiterando el planteamiento que la solución lógica y racional para la Colonización San Lorenzo es convocar una Licitación Internacional para cederla en concesión por m/m 50 años para ser rehabilitada, mantenida y operada, resarciendo los gastos a través de la venta del agua. Así, los colonos estarían en idéntica situación que los agricultores del Alto Piura, quienes, sin lloriqueos ni lamentos, pagan un elevado precio por el agua de riego por cuanto, para disfrutarla, deben previa y permanentemente, cumplir lo siguiente:

·         Perforar el pozo
·         Equiparlo
·         Operarlo
·         Mantener el equipo.