ASOMA LA ESPERANZA
(Piura, 08 agosto 2019)
Luis Gulman Checa
Casualmente cayó en mis manos la edición de “La
República”, edición de la víspera, encontrando una información ratificatoria
que Dios sí existe y que la justicia, aunque tarde, por lo general se hace
presente:
Fiscalía amplía
pesquisas por caso Trasvase Olmos.
El exgobernador regional Humberto Acuña declaró ayer ante
la fiscalía por presuntas irregularidades en proyecto.
Se trata de la concesión a “Trasvase Olmos”,
subsidiaria de Odebrecht, de la construcción del túnel Trasandino y la presa
Limón, con el objetivo de derivar las aguas del río Huancabamba para irrigar
las Pampas de Olmos, m/m 15 larguísimos años atrás.
Sin embargo, José Domingo Pérez, como es
natural y aceptable dado el tiempo transcurrido desde que sucedieron los hechos
(probablemente él aún estaba en el colegio) citó a declarar a Humberto Acuña,
expresidente y exgobernador regional de Lambayeque, sucesivamente, cuando lo racional
y lógico era convocar a Yehude Simon
Munaro, bajo cuya presidencia regional, cuando el “Cholo de Acero” estaba
afincado en palacio de Gobierno (con probados antecedentes de pedir coimas) se
concretó/firmo dicha concesión.
También tuvo muy importante participación en
esta ¿componenda?, PPK, en su condición, a la sazón, de ministro de Economía y
Finanzas, así como varias otras personas que ocuparon carteras ministeriales pero
que ya abandonaron este valle de lágrimas.
Considerando que los exfuncionarios de
Odebrecht se encuentran sometidos a un período de confesión sincera, es del más
elemental sentido común sean interrogados, clara y directamente, si en este
proceso, como sucedió en todos los demás
en que participaron, también fueron extorsionados por funcionarios peruanos
para recibir pagos ilegales - coimas - para dar pase a la
concesión, la cual, a todas luces, fue sumamente perjudicial para el Estado,
por cuanto, bajo tal fachada, casi se trató de una obra pública.
Igualmente, así como acaban de confesar que
pagaron a varios hombres de prensa por “servicios varios”, preguntarles si por aquel entonces también se vieron
obligados a soltar algún dinerillo para acallar/tranquilizar algún medio de prensa
que había recibido información que podría ser fatal para su cometido.
¡GRACIAS DIOS POR PONER EL TEMA EN EL TAPETE!