SÍ TENEMOS FUTURO

(Piura, 12 agosto 2019)

Luis Gulman Checa

Me refiero a nuestro país, al borde del colapso por haber sido, ancestral y permanente, asaltado por malos peruanos disfrazados de autoridades  y funcionarios, demostrando que sí le queda un hálito de vida y, por ende, la esperanza que puede rehacerse, progresar y proyectarse a un futuro promisorio en beneficio de toda la población.

¿En que se basa tal declaración?

En el maravilloso ejemplo que hemos dado al mundo reflejado en la organización de los Juegos Panamericanos, Lima 2019, actualmente en curso.

Comparemos la ardua tarea realizada para lograr éxito tan rotundo,  demostrado tanto por la construcción de gran cantidad de infraestructura como por la  impecable organización de los Juegos,  frente al malhadado desastre, replicado a lo largo y ancho del país por truncados emprendimientos de diversa índole a cargo de los impresentables referidos en el primer párrafo, liderando gobiernos regionales, municipalidades y otras entidades.

¿Cuál habrá sido la clave para lograr éxito tan formidable?

Simple y llanamente que, la autoridad que tuvo la competencia para hacerlo (¿PPK?), designó a la persona idónea - bien nacida, competente y honrada - para llevar a cabo la tarea, es decir, recogiendo el reiterado reclamo del suscrito, encargó la tarea a un GATO dotado de firmes cojones, en vez de a una pestífera y maloliente rata, como las que abundan por todo el país y nos han puesto al borde del abismo.

A riesgo de ser calificado de retrógrado o anti democrático, considero que el exceso de democracia, en un país donde la educación, mayormente, brilla por su ausencia, es la responsable de la crítica situación que afrontamos.

¿Prueba irrefutable de lo afirmado?

La gran cantidad de delincuentes e impresentables que  elegimos para desempeñarse como presidentes de la República, congresistas, presidentes y gobernadores regionales y alcaldes, como queda confirmado por los confinados en cárceles, prófugos sentenciados e innumerables procesados, la gran mayoría de los cuales terminarán entre rejas.

Así, está más claro que el agua, la urgente necesidad de reducir al mínimo las elecciones limitándolas para designar a las autoridades de los Poderes Ejecutivo y Legislativo, quedando el nombramiento  del resto, como antaño, en manos del Ejecutivo.

Asimismo, la medida sugerida, requiere como complemento indispensable, eliminar la maldita obligatoriedad del voto, reconociendo así que su ejercicio es un DERECHO y, por tanto, queda a la decisión del ciudadano ejercerlo o no. Con esta medida, desaparecerán del panorama los millones de peruanos quienes, siendo honestos y leales pero totalmente desinformados de lo más conveniente para ellos y el país, cambian su voto por, figurativamente, una lata de leche evaporada.

Resumiendo:

¡Voto facultativo y designación de funcionarios!