AEROPUERTO DE CHINCHERO: ¡CUIDADO CON LAS APP!
(Piura, 01 febrero 2017)
Luis Gulman Checa
Empecemos con una reflexión/pregunta:
¿Acaso no es la pura
verdad que la inmensa mayoría de personas hace hasta lo imposible para “sacarle
la vuelta al Estado” y/o “chuparle la sangre?
Pongo un ejemplo simple y de muy fácil
comprobación para cualquiera de las múltiples agencias/dependencias/oficinas, brotadas
como hongos en los últimos tiempos, para gerenciar el uso del agua:
Comparen las
Licencias de Uso de Agua y Áreas de apertura de los tantos emprendimientos
agrícolas de alta tecnología desarrollados en Piura, con las actuales. Así comprobarán que, tanto los
caudales originales como las áreas autorizadas se han multiplicado al infinito.
Ni qué decir, por supuesto, de la elusión y
evasión de impuestos, donde la norma imperante, salvo personas o instituciones
serias y formales, es la siguiente:
¿Yo pagar impuestos?
¿Acaso tengo cara de cojudo?
Entonces, estimado lector, si tal es la norma
imperante a lo largo y ancho del país en todos los temas y circunstancias,
pregúntese y respóndase usted mismo:
En una Asociación
Público Privada, sea de la naturaleza que fuera, ¿acaso no tiene usted la
seguridad que el objetivo del privado será “dejar en cueros” al Estado?
No se trata de echar más leña al fuego, mas no
podemos obviar que esta modalidad de
ejecución de Obras Públicas, obtuvo su partida de nacimiento cuando el Estado
ya estaba súper carcomido por la corrupción.
Recordemos la “formidable” Concesión
de Olmos:
Era una maravilla,
pues una empresa privada (Odebrecht) iba a ejecutar el trasvase de las aguas
del río Huancabamba a las pampas de Olmos y, naturalmente, iba a operar el
sistema por 30 años a cambio de una tarifa. Perfecto. Inobjetable. Sin embargo,
habiendo mantenido todas las prerrogativas favorables (30 años y tarifa), no
movió un dedo mientras el Estado no puso sobre la mesa ( en calidad de regalo) US
$ 70 millones para iniciar las obras.
Consejo para PPK:
·
Toma una dosis triple de “desahuevina”.
·
Dispón que el Estado construya el aeropuerto de
Chinchero.
·
Luego de inaugurado, si lo crees conveniente y
beneficioso para el país, lo cedes en concesión a un operador privado al que tú
le vas a “sacar el jugo”.