LAS MUNICIPALIDADES EN SU LABERINTO

(Piura, 02 febrero 2019)

Luis Gulman Checa

Tremenda batahola se armó a raíz del anuncio presidencial de estar evaluando  incrementar el sueldo de los alcaldes, desatando comentarios de los consabidos opinólogos.

1)    Un acierto siempre y cuando, antes, se saneen las cuentas municipales:

Para don Manuel Palacios, exdecano del Colegio de Abogados, es un acierto “porque el cargo es de 24 horas”. Sin embargo, “lo malo es que antes del aumento se debe sanear la economía de los gobiernos locales”. Además, dijo que las bajas remuneraciones originan  que no se quiera trabajar en la administración pública

2)    Gran decisión porque reduciría niveles de corrupción:

Humberto Correa (el firmante del contrato con Camargo Correa), aplaudió la medida por cuanto, dijo, el no mejorar remuneraciones podría llevarlos a buscar otra manera de ganar dinero. (¿Coimas, robos, latrocinios?).

Para hacernos una idea del reclamo del exdecano recurramos a la siguiente nota informativa dando cuenta de declaraciones del alcalde Díaz Dios, quien, debemos señalar, peca al hablar en primera persona como si la entidad municipal fuera su chacra (¿niño con juguete nuevo?):

“MPP está quebrada, con déficit de S/. 2 mlls y me piden aumento de S/. 500”

La confesión de parte del flamante alcalde de Piura ratifica lo que todo el país sabe: Que las municipalidades, a partir de la instauración de las elecciones locales, devinieron en, generalmente,  focos infecciosos donde se saquea el erario, tanto engrosando sucios bolsillos como cargando las ubres públicas con  inútiles e innecesarios.

¿Tendrá idea, don Manuel Palacios, a cuánto ascendería el monto requerido para poner no solo en azul las cuentas de las municipalidades del país sino también dotarlas de los presupuestos para que sigan operando tal cual?

Sobre su argumentación que el sueldo debe subir para animar a las personas a trabajar en la administración pública (ojo: estamos hablando de alcaldes), es una pachotada, por cuanto, el problema es exactamente lo contrario, pues, a lo largo y ancho del país pululan personas que ansían los cargos a pesar de los miserables sueldos que recibirían.


La argumentación de Humberto Correa es una falacia. ¿Por qué? Porque a quien postula con la intención de robar, uno, dos o tres mil soles de aumento, ni le va ni le viene, por cuanto, imitando a varios expresidentes de la República, también se siente con el derecho de salir rico y fondeado del cargo.

Sacar a las Municipalidades de su laberinto es muy sencillo y la receta es la siguiente:

·         Reconocer que el status actual es INSOSTENIBLE.
·         Declarar, todas las municipalidades del país, en emergencia/reorganización, empezando por abolir la ESTABILIDAD LABORAL, de modo que permanezca en la planilla el personal estrictamente necesario para cumplir las funciones asignadas.
·         En atención a que el alcalde es a la ciudad como el ama de casa al hogar, el funcionamiento se solventará, única y exclusivamente, con los diversos pagos que los vecinos abonarán a la institución.
·         Autoridades DESIGNADAS. Nunca más elegidas.