RESTITUYAMOS LA CÁMARA DE SENADORES

(Piura, 08 noviembre 2018)

Luis Gulman Checa

Son tantos, acuciantes y de distinta naturaleza los problemas que están asolándonos, que muchas personas podrían reaccionar, de primera intención, de la siguiente manera:

¡Qué diablos me importa que haya o no cámara de Senadores cuando el problema que me agobia es el corte de agua en el canal Miguel Checa y/o los pozos inoperativos del Alto Piura y/o lo poco que saco al día en mi moto taxi por la maldita competencia de las 27,538 motos lineales más mis colegas conduciendo, además del mío, otros 33,215 mototaxis; etc.!

Sin embargo, analizando la situación, calmada y objetivamente, tengamos en consideración los siguientes hechos: 1) El próximo 09 de diciembre, tenemos que ir a votar para evitarnos la multa; 2) Una vez en la cámara secreta el único esfuerzo que nos demanda la citada restitución es marcar el al lado de la pregunta al respecto; 3) Si así lo hiciéramos, desaparecerían como por arte de magia muchos de los problemas que ahora nos agobian originados, única y exclusivamente, por haber estado sometidos por años a los designios/dictados de una sola Cámara, general y mayoritariamente, ocupada por sub normales.

En atención a la bella frase que dice recordar es volver a vivir, remontémonos a la aciaga época del primer gobierno de Alan García cuando el incalificable quiso apropiarse de la Banca. ¿Acaso no fue la Cámara de Senadores, además de un juez auténtico, quienes frenaron tremenda burrada?

No vayamos tan atrás y analicemos los asquerosos e impropios acuerdos/contubernios que se vienen  dando al interior del Congreso actual, como, por ejemplo, las das incalificables leyes aprobadas a instancias de “perro de chacra” que el Tribunal Constitucional echó al desagüe.

Para aquellas mentes ligeras que solo aquilatan los centavos mostrándose opuestas a la citada restitución porque implicará mayores gastos al Estado, les rogaría pensar en el gran aserto que dice “lo barato sale caro”.

Igualmente, deberíamos comparar nuestra situación, cámara única, con la de la gran mayoría de naciones del mundo, incluidas nuestras vecinas,  en las que impera el sistema bicameral, lo que debería llevarnos a concluir que el país desfasado es el nuestro, por lo que de no aprovechar la brillante y próxima oportunidad  que tendremos a la mano dentro de pocos días, no tendríamos perdón de Dios.