¿SOLO LOS PECES CHICOS?

(Piura, 29 noviembre 2018)

Luis Gulman Checa

La edición de “Correo” de la fecha apareció con un titular de portada que, instantánemaente, me trajo a la mente el artículo de hoy:

BANDA ROBA S/. 1 MILLÓN.

La Fiscalía junto a 300 policías allanan 36 viviendas de personas vinculadas a asaltos y extorsiones en la provincia de Sullana.

Reconociendo el esfuerzo conjunto desplegado por el Ministerio Público y la Policía Nacional por desratizar la Perla del Chira eliminado alimañas de menor cuantía, es decir, ladroncillos de dos por medio que rapiñan, comparativamente, centavos por aquí y por allá; me pregunté:

¿Por qué diablos, el Ministerio Público, tan diligente persiguiendo delincuentes de ojotas y polos chinos, no mueve un dedo investigando las serias y documentadas denuncias que duermen en sus gavetas desde meses o años atrás referidas a tropelías/malos manejos inmersos en la gestión del Proyecto Alto Piura implicando cientos de millones de soles perdidos,  perpetradas por presuntos delincuentes de CUELLO Y CORBATA?

No sé por qué me vino a la mente el aserto que dice quien no tiene padrino no se bautiza”, aunque, supongo, debe ser porque mientras los detenidos en Sullana estarían huérfanos de padrinazgos, a los otros deben sobrarles..

Sin embargo, reconozco poder estar cuestionando injustamente la aparente apatía/decidía, del Aparato de justicia por cuanto la razón de su inactividad podría ser la enorme carga laboral por lo que el tema del Alto Piura tendría que esperar la resolución de los trescientos sesentaicinco mil asuntos previos.  

Dolorosa reflexión:

Una vez más debo reconocer, hidalgamente y con enorme dolor de corazón, la supremacía que ejercen sobre nosotros los piuranos nuestros hermanos lambayecanos. Lo he dicho varias veces y ahora lo reitero: nos arrebataron  nuestra agua del piurano río Huancabamba dejándonos, coloquialmente, como palo de gallinero y, ahora, mientras la corrupción en Piura se agiganta y nuestros fiscales descansan, allá, un FISCAL, está ad portas de encanar a un personaje de cuello y corbata.