INCONSCIENCIA

(Piura, 18 febrero 2020)

Luis Gulman Checa

La noche de ayer me bastó un vistazo a un programa periodístico propalado  entre las 21.00 y las 22.00  horas,  conducido por un joven y ampuloso periodista entrevistando a un fiscal,  quien, a diferencia del candidato frustrado al que le obsequiaron un jabón, pedía a gritos una máquina de afeitar; para constatar cómo la inconsciencia y/o carencia total de sentido común se desparrama a lo largo y ancho del país a través de demandas/exigencias irracionales.

Resumiendo, el fiscal, fiero y enérgico, exigía al gobierno (¿al “terrorista” presidente Vizcarra?) cumplir con efectivizar los múltiples beneficios que ya les fueron concedidos, por ahora en el papel, pero continúan sin aparecer en sus boletas de pago. Ello no fue todo por cuanto culpó tanto a esta circunstancia como a la falta de recursos del Ministerio Público el fracaso de la tan cacareada lucha contra de corrupción que viene esgrimiendo el  mandatario.

Estimado lector (a), considerando los distintos estratos o sectores del país que tienen pendientes reclamos y demandas que no pueden ser satisfechas/atendidas por falta de recursos en el erario, piense en lo siguiente:

Si de usted dependiera asignar algún ingreso extra de recursos al fisco, ¿lo destinaría para incrementar aún más los magníficos sueldos de los fiscales (comparativamente con otros servidores públicos) o, por lo contrario y por ejemplo, se inclinaría por orientarlos a los sectores Salud y/o Educación?

Para empeorar la situación, el entrevistador, en vez de formularle una observación como la señalada ut supra  al reclamante, tácitamente avaló su posición. Así, se estaría reconfirmando que la prensa, en general y mayoritariamente, viene actuando como quintacolumnista contra los intereses del Perú y los peruanos.

Sin embargo, en contraposición a lo expresado por el exaltado fiscal, en Lambayeque, un colega suyo que sin duda gana mucho menos que aquél, viene ganando una guerra denodada contra diversas mafias instaladas ahí.

Confirmando que la moneda tiene dos caras, mudándonos a Piura, lamentable y penosamente, constatamos que no hemos sido bendecidos con un solo fiscal que merezca tal calificativo por cuanto las mafias, atropellos y latrocinios continúan multiplicándose y fortaleciéndose sin que ellos, zurrándose en sus altísimas responsabilidades, resuellen.

¿Es aceptable la apatía/inacción del M.P. ante el evidente robo/saqueo implícito en la conducción del Alto Piura como, también, ante los desquiciados atropellos producidos por la autoridad regional?