QUIEN A HIERRO MATA A HIERRO MUERE
(Piura, 25 septiembre 2020)
Luis Gulman Checa
El refrán del epígrafe se me reveló
instantáneamente tan luego leí las agoreras portadas de los diarios piuranos:
“El Tiempo”: Valles
agrícolas se quedan sin agua
Por crisis hídrica, PECHP y Juntas de Usuarios acuerdan
cortar agua de uso agrícola en valles del Chira, Medio y Bajo Piura y Sechura,
desde el lunes 28 hasta el 04 de octubre. EPS Grau promete no cortar el agua
potable a familias, pero alista plan de contingencia.
“Correo”: UNA SEMANA
SIN AGUA
Desde el 28 de septiembre hasta el 04 de octubre se cortará
el líquido elemento por el deficiente ingreso de agua al reservorio de Poechos.
La medida afectará a más de 8,000 hectáreas de cultivos
permanentes y transitorios en el Medio y Bajo Piura.
Las medias verdades, peores que mentiras, abundan
constantemente en las informaciones, como, por ejemplo, en la
comentada. ¿Por qué? Por cuanto debió precisar TODAS las zonas afectadas y no
limitarse a unas cuantas. ¿Acaso Cieneguillo y los desarrollos colgados (irregularmente) del Canal
de Derivación, no serán afectados?
En resumen, cerrando con candado las compuertas
del reservorio de Poechos, no solo toda la agricultura abastecida por el mismo
se verá afectada sino también las poblaciones que abastece: Paita, Piura,
Sullana, Talara y todos sus anexos.
¿A qué viene la mención al hierro? Simplemente
que la emergencia ha sido causada, cual virtual suicidio, por la estupidez e
irracionalidad de algunos hombres, representada en la siembra de arroz con agua
regulada, lo que alcanzó el grado de bestialidad, al perpetrarse, también, en
segunda campaña.
Lamentablemente, quienes vienen manejando el
destino de Piura no solo desconocen el aforismo que dice “guardar pan para mayo”,
referido a que siempre debe tenerse presente la eventualidad de inconvenientes; sino, increíblemente,
que en Piura puede llover o puede no llover.
Sería bueno que los auténticos estudiosos del
clima se manifestaran respecto a cómo se comportará hasta finales del presente
año, pues, si los aportes al reservorio continuaran con la tendencia que vienen
mostrando, hasta un ciego diría que, en el acto, debería cortárseles el riego a
los cultivos de arroz, el cual, además de tragar enormes cantidades de agua
gratuita, ni siquiera ofrece mano de obra como antaño (almácigo, trasplante,
siega, carguío a las eras, trillado) al haberse mecanizado al extremo.