BREVETES: ESCANDALOSA CONCERTACIÓN (*)

(Piura, 27 enero 2018)

Luis Gulman Checa

Me refiero a las Licencias de Conducir las cuales tienen fecha de caducidad, siendo necesario concurrir periódicamente a la Dirección de Transportes para tramitar una nueva. Entre otros requisitos, es necesario pasar un examen médico única y exclusivamente en consultorios y/o médicos autorizados (se supone por la misma Dirección) y ubicados, así como las funerarias rodeando hospitales, próximos a la sede de tal entidad.

A juzgar por el incremento que ha sufrido el costo del citado examen, la inflación que viene afectando al Perú ha superado largamente a la de Venezuela según se deduce de la siguiente escalada:

Noviembre 2017:  S/. 80.00
Diciembre  2017:  S/.100.00 y S/. 150.00
Enero         2018:  S/.200.00

Por si no ha quedado claro, los montos ut supra equivalen al costo del examen el cual, de noviembre 2017 a enero 2018 tuvo un incremento del 250%.

Siendo triste y lamentable la constatación de que en  el Perú cada vez es más cierta la sentencia de Manuel Gonzales Prada: “Donde pones el dedo salta la pus”, como está quedando demostrado al haberse hecho público que la corrupción, robo, cohecho y asalto al erario nos han infectado hasta el tuétano  desde tiempo atrás; habría que ser caído del palto para no saber que la citada concertación/robo tiene una de las siguientes causas:

1)    La autoridad de Transportes en Piura es  idiota al  extremo de escapársele las tortugas, como lo demostraría el que no se ha enterado de este robo.

2)    La tal autoridad está perfectamente al tanto y tiene su participación sobre el monto que es robado a cada ciudadano obligado a renovar su Licencia de Conducir.

Me pregunto si en Piura existirá alguna de las tan mentadas instituciones que, supuestamente, deben velar por la ciudadanía como el Ministerio Público y la Defensoría del Pueblo, aunque bien mirado, la autoridad de Transportes, obvia responsable del latrocinio descrito, depende del señor Gobernador, Veamos qué sucede.






(*) El presente artículo lo envié al diario “El Tiempo” (Teo Zavala) el pasado 16 de enero y, sorpresivamente, el director  (que sí tuvo a bien publicar mis tres artículos en pro del futuro del Club Grau) no creyó oportuna/necesaria su publicación.

En mi opinión, ello ratifica lo que afirmé el día de ayer respecto a la renuencia del ¿mal? Llamado Cuarto Poder del Estado a airear las prácticas corruptas que, cada día, infectan más a fondo nuestro diario devenir.


¿Algún lector conocerá a un miembro del Ministerio Público para sugerirle  imitar  a los limeños que están encanando a los miembros del “Club de la Construcción”?