EL REINADO DE LA IRRACIONALIDAD
04.01.2018
Luis Gulman Checa

Se supone que el bienestar del hombre es el fin supremo que guía a los gobernantes. Así, por ejemplo, si una autoridad, digamos un alcalde, transitando por la ciudad a su cargo observa, simultáneamente, un mendigo despatarrado en plena calle  de cuya nariz brota sangre en abundancia y, metros más allá, un forado en una acera (como  la ubicada al costado de la exagencia del BCP), ¿cuál de ambas urgencias cree usted, estimado lector, debe atenderse primero?

Sin duda, hasta un animalito del campo, se apresuraría a prestar inmediata atención al mendigo sangrante. Sin embargo, ante los estropicios sufridos en el ámbito regional a raíz de las moderadas lluvias del pasado verano, las autoridades responsables vienen ignorando, obviando y postergando la atención preferente e inmediata debida a los seres humanos.

Información propalada en medios de la víspera:

“Rehabilitación de diques y defensas del río comienza la próxima semana”.

No encuentro los adjetivos idóneos para calificar a quienes han puesto por delante estas tareas - estando más claro que el agua que pasará no menos de un lustro hasta que el río Piura vuelva a descargar caudales decentes - mientras el deterioro de vías y sistemas de saneamiento, colapsadas en distintas poblaciones de la región, atentan cada instante contra la salud y bienestar de las personas. Entonces, estimado lector, preguntémonos el motivo de estos irresponsables para priorizar estas acciones. Se me  ocurren  los siguientes:

1°) Son ineptos y torpes hasta la temeridad y/o 2°) Son los grandes pícaros y sinvergüenzas abocados a ejecutar obras  que les redituará suculentas coimas para engordar sus pestíferos bolsillos al ser casi imposible evaluar y controlar, tan igual como sucedió con la incalificable des colmatación.


¿Dónde están nuestros conductores de masas, en especial de izquierda, perdiendo tiempo y energía protestando contra el legítimo indulto otorgado a  AFF, mientras los piuranos morimos de a poco y día a día tanto por culpa de estas incalificables autoridades como por su punible silencio?