CONDUCTOR DESCALIFICADO

(Piura, 20 marzo 2018)

Luis Gulman Checa

El accidente sufrido por  un ómnibus transitando entre las ciudades de Piura y Paita  con 60 personas a bordo, es el súmmum de la  falta de criterio del chofer quien, ex profesamente, provocó su volcadura  para evitar colisionar con un vehículo menor que invadió su carril, faltando a su deber de proteger a sus pasajeros, muchos de los cuales sufrieron daños irreparables.

Si el conductor hubiera ido concentrado en su tarea (como necesaria y obligatoriamente deben permanecer siempre los choferes de verdad) y, obviamente, tenido dos dedos de frente; simple y llanamente debió sacar el pie del acelerador y enganchar reduciendo la velocidad para generar el menor daño posible al invasor,  sin poner en riesgo la estabilidad de su unidad y, consiguientemente, la vida y salud de los pasajeros que estaban a su cargo.

Digresión:

Es propicia la oportunidad para llamar la atención respecto a la pésima calidad de los conductores de ómnibus en la ruta señalada por cuanto se zurran en la norma que ordena circular, día y noche, con las luces bajas encendidas. Y la PNP, supuestamente encargada de hacer respetar esta y otras disposiciones, como eliminar moto taxis, ¿existe o está pintada en la pared?

Obviamente, si el invasor hubiera sido un rinoceronte en vez de un zorro, como podría  calcificarse un tráiler cargando 60 toneladas, ahí sí el conductor tendría que haber abandonado  la carretera sin importar dónde fuera a dar, por cuanto sin duda estaría defendiendo no solo la vida de gran número de pasajeros sino la suya propia ya que él sería el primero en volar a las puertas de San Pedro.

Según informaciones, el vehículo menor, que recién había pasado el peaje, llevaba una pareja en evidente estado de ebriedad, hecho fatal y lamentable que  debería llevar a las autoridades competentes y responsables a dar uso pleno a tales instalaciones actualmente limitadas, única, exclusiva y legalmente, a cobrar el justo y necesario peaje a quienes usan la carretera.

¿No es acaso del más elemental sentido común concluir que en cada una de estas instalaciones debe haber, permanentemente, un piquete policial auscultando con detenimiento no solo a los conductores sino también las condiciones de los vehículos?

¿Cree usted, estimado lector, que es propio de un país civilizado que se permita el paso a vehículos destartalados (obviamente sin Revisión Técnica) y/o sin luces y/o sobrecargados de personas?

¡SEÑOR DIOS, POR FAVOR, ILUMINA A NUESTRAS AUTORIDADES!