AL CÉSAR LO QUE ES DEL CÉSAR
(Piura, 03 agosto 2017)
Luis Gulman Checa
Así como dos días atrás critiqué acremente al
vicegobernador, Alfredo Neyra, por desconocer la orografía de nuestro
departamento; hoy día le brindo mis respetos por sus opiniones vertidas en
contra de la modernización de la refinería de Talara publicadas en la edición
de Perú.21 del pasado día martes, monstruoso
dispendio de dinero (¿Robo descarado de recursos del Estado?) por parte del
gobierno central, usando a talareños, y piuranos en general, de cholitos, ante el silencio cómplice y
vergonzoso de nuestras autoridades. A Dios gracias, lo manifestado por el
vicegobernador, aunque tardíamente, nos lava la cara.
Lo dije antes y lo reitero ahora:
Con una módica parte
de la suma que el Estado está echando a
la basura con el pretexto de modernizar la refinería de Talara (cuando el
petróleo casi se extinguió en la provincia y las refinerías están tiradas en el
mundo), podría potenciarse al infinito la agricultura departamental, actividad
permanente e indispensable para la vida, ejecutando las siguientes obras y/o
rehabilitaciones, según el caso: (*)
·
Sistema
de Drenaje del Bajo Piura.
·
Sistema
de Drenaje de El Arenal.
·
Rehabilitación
total y absoluta de la Colonización San Lorenzo.
·
Construcción
de la represa de Vilcazán.
·
Construcción
de la represa de Santa Rosa.
·
Recuperar
parte de la capacidad de almacenamiento de la represa de Poechos.
(*) El desarrollo del
Alto Piura no lo menciono por cuanto, supuestamente, está en ejecución.
Naturalmente, atendiendo el aserto indicador
que el hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra,
considero indispensable que todas las obras de infraestructura de riego y
drenaje, tan igual como viene sucediendo
con las carreteras y otros servicios como la generación y distribución de
energía eléctrica; se cedan en concesión para
ser operadas por empresas privadas, única forma de que al agua regulada,
como sucede en el mundo desarrollado en el que cuesta un ojo de la cara, se le
dé el uso más eficaz buscando tanto incrementar la productividad como también
el valor total de la producción.
Tan idílica y muy posible situación,
convertiría a Piura en una potencia mundial de la agroexportación.