DUBERLÍ: ¿QUINTACOLUMNISTA?

            (Piura, 21 julio 2018)

Luis Gulman Checa

Umberto Jara, en la edición de la víspera de “Perú.21”, publicó una columna titulada ADIÓS DUBERLÍ, demostrando, con puntos y comas, que el Perú, coloquialmente,  anda de cabeza y/o patas arriba.

No se puede decir menos cuando una persona con las antecedentes de Duberlí Rodríguez llegó a presidir el Poder Judicial , como también, antes que él,  Yehude Simon fue presidente regional de Lambayeque y, posteriormente, primer ministro designado por Alan García.

Duberlí pasó de ser militante comunista preso en dos oportunidades a juez, previo paso por la Cámara de Diputados integrando Patria Roja en el período 1985 -1990. En tal condición, suscribió el proyecto de ley N° 415 presentado el 14 diciembre de 1985 (cuando el terrorismo brillaba en el firmamento)  al alimón con los siguientes “angelitos”: Yehude Simon, Julio Castro Gómez, Manuel Dammert y Manuel Piqueras, con el siguiente propósito:

Conceder amnistía a los terroristas, incluidas dos exigencias: la restitución de los bienes de los que hubiesen sido privados y también que, según el artículo 5° Del proyecto: “que el Poder Judicial y el Poder Ejecutivo procederán en el día, bajo responsabilidad, a eliminar los antecedentes penales o judiciales que pudieran existir contra los amnistiados”.

Entonces, recapacitemos: si un sujeto con semejante prontuario llegó a presidir el Poder Judicial, ¿acaso no fue un despropósito armar un laberinto porque una congresista le dio chamba a una persona que había cumplido su pena?

Recordemos que Duberlí es natural de Huarmaca, el mismo distrito en el que una columna terrorista de Sendero Luminoso emboscó y asesino 18 policías más de 20 años atrás. ¡Ojo! El recordatorio no pretende insinuar que Duberlí  inspiró, guió ni comandó esta  banda criminal.

No se puede obviar la grave omisión de los “periodistas” piuranos al haber pasado por alto los hechos puntualizados por Umberto Jara, aunque también sería dable imputarle a éste el haber esperado hasta ahora para airear tan nefastos anrecedentes en vez de haberlo hecho, por ejemplo, tan luego fue designado juez supremo.

Personalmente me alegra y mucho lo sucedido con Duberlí, pues jamás me convenció su actitud en sus últimas visitas a Piura en ejercicio de su alta investidura, apapachando a ronderos a los que dio status de instancia judicial y, también, no solapadamente, denostando de la minería formal y legal haciéndose  el ciego ante la brutal y contaminante ilegal.