DEFENDÁMONOS: ECHEMOS EL CONTRATO AL DESAGÜE
(Piura, 05 marzo 2019)
Luis Gulman Checa
Obviamente, me refiero al resuelto por el
gerente del Peihap ante las varios y claros indicios de que resultaría oneroso
e inútil, en vez de culminar precisando al detalle las acciones/obras
necesarias para cumplir los objetivos: 1) Salvar las localidades dispersas en
la cuenca del salvaje y torrentoso río Piura de sus futuros desmanes y 2)
Eliminar, tan luego va lloviendo sobre Piura, el agua que, ahora, se acumula en
las cuencas ciegas. En vez de ello, reitero, solo sería un medio más para
esquilmar al Estado, usándonos a los piuranos, nuevamente, como pretexto para otro latrocinio. Veamos las señales:
·
Fue
suscrito por la administración anterior inmediatamente antes de exhalar su
último suspiro.
·
Se
le encargó a una entidad prácticamente
inexistente y probadamente incapaz, cuyo historial registra un cúmulo de
errores/atrocidades, tiznados fuertemente de corrupción: el Peihap.
·
Para
aumentar nuestra sospecha/resquemor, el presidente de la República, quien tonta
e irresponsablemente recortó el tiempo de su periplo europeo por los
ladridos de algunos (a) impresentables, de
España, país al que pertenece el consorcio ganador del citado Estudio, vino
directo a Piura a ¿ordenar? que el contrato debía cumplirse inexorablemente. “La mujer del César….”
·
Pese
a que el decano, “El Tiempo”, ha venido siendo fiero defensor del citado
contrato, su hija dominical, “Semana”,
publicó un amplio y pormenorizado artículo de Zivko Gencel, quien llegó a Piura
como ingeniero de Energoprojekt y quedó afincado, haciendo cera y pabilo del mismo,
fundamentalmente, por la vaguedad e imprecisión de los términos de referencia,
llevándonos a concluir que, de seguir adelante, sería un mamotreto más, bueno para nada.
·
Para
colmo y/o derramar el vaso de la sospecha, del interior de la entidad
encargada, apareció una denuncia referida a un exceso en el monto del contrato de
CUATRO MILLONES de soles.
Otra muestra palpable de las irracionalidades
inmersas en el citado contrato, calificable como auténtico arroz con mango, es el
hecho de haber metido en un mismo saco el manejo del río y el drenaje pluvial
de la ciudad de Piura, habida cuenta que, para cualquier persona m/m pensante,
son objetivos totalmente independientes el uno del otro.
Tengamos presente que los Estudios, por sí
solos, no sirven para nada ¿Prueba de lo afirmado? El Alto Piura, cuyos
Estudios, necesarios para proceder a convocar la Licitación para Ejecutar
Estudios y Obras
, quedaron culminados y aprobados en Agosto
de 1996. Esta próxima la ¿conmemoración? del aniversario XXIII de tan magno acontecimiento y, la concreción
de tal anhelo no solo está en CERO sino que la fuente, el río Huancabamba, de
la que provendría el recurso para mejorar el riego en el valle del Alto Piura, hace
varios años está irrigando las pampas de Olmos.
Teniendo en cuenta que realizar Estudios es
fácil, por su ínfimo valor en comparación con el de las obras que recomienden,
en el caso del manido drenaje pluvial de Piura, cuyo Estudio, comparativamente,
costaría una peseta frente al costo de lo que habría que construir; el sentido
común indica que, cuando haya una posibilidad firme y real de financiar tan
formidable emprendimiento, se convoque una Licitación para Ejecutar Estudios y
Obras.
¿Y la ardua tarea de
domeñar el salvaje río Piura?
La desvergüenza no tiene límites. He leído en
un medio la siguiente sentencia, en defensa del contrato resuelto:
Piura no estará a
salvo mientras no se construyan los imprescindibles reservorios de amortiguamiento
en la parte alta.
No dudo que, en atención al dicho serrano
referido a que, ante la ausencia de ingenieros, sueltan un burro para trazar los caminos; en Piura; hasta las
acémilas saben que la primera (y quizá única) tarea para acabar con los muy
eventuales desmanes del río Piura, es restituirle su salida directa al mar.
Finalmente, recordemos que la Universidad de
Piura cuenta no solo con un formidable Laboratorio de Hidráulica sino también
con profesionales altamente calificados en la materia, y, como justa y precisamente
el tema del manejo del río es propio de tal disciplina, invoco, a las
autoridades universitarias, determinen, desinteresada y rápidamente, la
forma/camino más idóneo para echar el río al mar.